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En el marco del 8M, Día Internacional de la Mujer, la Ibero Puebla realizó un foro en compañía del  Centro Prodh, para hablar sobre el caso de Keren Ordoñez, una mujer acusada por el delito de secuestro y que enfrenta una sentencia de 50 años de prisión. 

El Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez es una organización de la sociedad civil de México dedicada a la defensa. Misma que ha llevado el caso de Keren, mujer que ha sufrido violencia de género en el sistema de justicia penal por la forma en la que fue procesada. 

Keren Ordoñez, lleva 7 años privada de su libertad y separada de su hija recién nacida, pues al momento de su detención la bebé tenía 29 días de nacida. 

De acuerdo con el Centro Prodh, durante la investigación de este caso se han encontrado diversas irregularidades y violaciones a sus derechos humanos. 

Esto, luego de que la acusaron por participar en un secuestro con pruebas fabricadas y su confesión se hizo de manera obligada por medio de torturas y amenazas con su hija.  

Por ello es importante mencionar que el caso de Keren Ordoñez, es un ejemplo del uso discriminatorio del sistema penal. Ya que la organización que ahora la respalda, señala que la  Procuraduría General de Tlaxcala, obligó a la mujer a firmar hojas en blanco. 

¿Cómo detuvieron a Keren?

La joven originaria de Xalapa Veracruz, sufrió de una detención arbitraria en el mes de diciembre del 2015. Esto comenzó cuando Keren salió de su casa para reunirse en un lugar que fue citada por su pareja, para que le pudiera brindar un apoyo económico.  

Cuando Keren llegó al lugar con su hija, llegaron elementos no identificados del estado de Tlaxcala y sin una orden de aprehensión los detuvieron, a su bebé, y a su pareja. 

Según lo que Centro Prodh relató, separaron a la mujer de su hija de apenas 29 días de nacida. En el transcurso de su traslado la torturaron y cuestionaron sobre el supuesto secuestro con el que estaba vinculada. 

Incluso, los elementos de seguridad amenazaron a Keren con desaparecer a su bebé, ya que la niña no contaba aún con acta de nacimiento. 

Una vez que la ahora reclusa llegó a la Fiscalía General del estado de Veracruz, no se le proporcionó defensa y estuvo incomunicada por 11 horas. 

Cabe señalar que la acusada sufrió discriminación en razón de género durante su proceso, ya que, a su entonces pareja, únicamente lo sentenciaron a 4 años de prisión. Mientras que Keren recibió una pena de 50 años con pruebas ilícitas. 

Por último, la madre de la víctima se tuvo que movilizar para dar con el paradero de su hija y su nieta ya que jamás le notificaron a un familiar.  

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