Hoy en día podemos escuchar una infinidad de información negativa acerca del “Outsourcing” (OS), inclusive el mismo Arturo Herrera, Secretario de Hacienda y Crédito Público, se ha manifestado por desaparecer esta industria. Pero realmente, ¿qué está mal con esta actividad?.
La gente identifica el término de OS al momento en que una empresa contrata a otra para asignar responsabilidades dentro de la contratante y en este proceso la primera transfiere personal a la segunda, para que sea administrado con recursos de la segunda.
El Outsourcing es parte inherente y coadyuvante en cualquier cadena económica, las empresas, por lo general, se especializan solo en un proceso comercial, pero deben contratar a otras empresas que contribuyan en el proceso productivo. ¡Esto está bien!
El problema surge cuando las segundas empresas no son supervisadas y empiezan a tener un comportamiento que afecta principalmente el pago de Seguridad Social, el pago de contribuciones de ISR y la contribución a las cuotas de retiro de los trabajadores. Platiquemos sobre cada una de ellas.
El primer síntoma de una mala administración del OS es que el trabajador no este dado de alta en IMSS. Este es un primer mal reflejo ya que se desprotege al trabajador y se bloquea el derecho de este a tener asistencia médica pública, sumado a esto vienen muchas actitudes que afectan la recaudación fiscal tales como: pago al trabajador con efectivo conseguido a través de una compra de factura falsa, falta de pago del impuesto sobre nóminas y falta de contribución al sistema de ahorro para el retiro.
El otro tema que resulta afectado, con una mala administración del sistema OS, es la evasión de pagos de ISR. Los trabajadores, al estar dados de alta en IMSS y estar bajo una nómina, tiene que aportar una parte de su sueldo al fisco como pago de ISR. Aquí hay de dos, puede ser que el trabajador quiera evadir esta contribución o también puede ser que la empresa quiera evadirla. El ISR por salario generalmente se calcula por tablas sobre nivel de ingreso, y las retenciones de ISR están exentas para aquellas personas que perciban hasta tres salarios mínimos.
El tercer tema de afección de un mal Outsourcing es el daño al porvenir del trabajador. Si la empresa que contrata no paga cuotas de cesantía y vejez, entonces no se está aportando para el fondo del retiro del trabajador; esto ocasionará que el trabajador, al llegar a edad adulta, no tenga derecho de una jubilación.
Amigos, si eres un empresario que contrata OS o tu empresa da servicios a otra empresa, asegúrate de cumplir los puntos mencionados anteriormente para que lleves en forma sana la administración del personal.
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