Antier vi a un querido amigo, Mao, y tuve la oportunidad de tomarme un refresquito con él. Me hizo una pregunta muy directa: George, ¿Crees que va a haber una crisis económica?, a lo cual contesté instantáneamente: Claro que sí, ¡Ya estamos en crisis!
Es evidente que ¡Ya se sienten aprietos económicos!, por este motivo amigos emprendedores hay que tener mucho cuidado al momento de arrancar tu idea de negocio.
Pero, para nuestros amigos Millenials que eran todavía unos niños en la última crisis del 2007, ¿Qué significa esto?; este fenómeno inicia con una recesión, la cual se atribuye a dos o más trimestres consecutivos con baja en la tasa de crecimiento del PIB, nacional o mundial.
Definitivamente la recesión ya está sucediendo, pero esto está pasando tanto en México como en todo el mundo.
Según el Banco Mundial 1, se espera una desaceleración económica global entre el 2019 y 2020:
“Se pronostica que el crecimiento de Estados Unidos bajará al 2,5 % este año y se desacelerará hasta llegar al 1,7 % en 2020. El crecimiento de la zona euro podría llegar a alrededor del 1,4 % en 2020-21…El crecimiento de las economías emergentes y en desarrollo se ve limitado por el poco dinamismo de la inversión”
Pero, ¿por qué es tan importante considerar este fenómeno al arrancar tu negocio?, porque impacta directamente en las siguientes variables:
1. Inversión, en este periodo económico te encontrarás con dificultades para levantar capital, ya que los inversionistas deciden poner su dinero en resguardo sin ponerlo a mover en negocios de alto riesgo. Al no haber inversión se ve limitado el circulante de la macro y micro economía.
Las principales industrias afectadas en estos ciclos son la de la construcción y la automotriz.
2. Consumo, esta variable va relacionada directamente con la inversión, ya que en este periodo económico se dan muchos despidos, por lo que se reduce el ingreso para los posibles clientes. Con esto, el mercado solo se limita a comprar productos de necesidad básica.
3. Producción, obviamente como el consumo baja, los pronósticos de producción disminuyen en correlación a la anterior variable. Las empresas reducen su oferta porque la demanda se redujo.
Como caso particular, en México experimentamos este fenómeno como tendencia global, pero adicionalmente las políticas económicas actuales de presentar superávit en 1% está ocasionando una reducción en el flujo de efectivo del mercado nacional. De acuerdo a la estadística llevada por el Banco de México, el circulante en México ha tenido una reducción de más de 120 mil millones de pesos del primero de enero del 2018 a la fecha.
En estos momentos, los dueños del dinero los están recuperando y reteniendo para forzar que las tasas de interés suban, pero los gobiernos, al ver el problema, las están bajando. Podemos llegar a ver economías inclusive con tasas anualizadas negativas.
Pero, ¿qué tenemos que hacer?; pues para estos momentos no hay una regla escrita. Recomiendo, bajo mi experiencia del 2017, lo siguiente:
a) Conserva, a toda costa, tus fuentes de ingreso y clientes actuales.
b) Busca obtener un contrato de respaldo, aunque será una tarea fácil.
c) Camina a paso que no canse de aquí al cierre del año.
d) Confía en que en el 2020 habrá una recuperación mundial, así que prepara las redes para salir a pescar.
e) Compensa tu faltante de flujo con un crédito a largo plazo, confía en el crédito.
f) Haz negocio con las necesidades básicas, esas raras veces disminuyen su demanda.
Amigos emprendedores, tengan confianza y fe en la incertidumbre y emprendan y aprendan en tiempos difíciles.
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1. Banco Mundial, El Crecimiento Mundial se Debilitará, https://www.bancomundial.org/es/news/press-release/2019/06/04/global-growth-to-weaken-to-26-in-2019-substantial-risks-seen, consultada el 8 de octubre del 2019.