Sunday, 05 de May de 2024

El Puente Romano

Lunes, 06 Enero 2014 11:00
Juan Carlos Fernández

El hombre del año

Por :
  • Imprimir
  • Email

Columnas Anteriores

Días finales

El año termina y analizando y revisando noticias y sucesos busco al hombre del año. Mi conclusión es que sin duda no es otro que el argentino Jorge Mario Bergoglio quien pasará a la historia como el Papa Francisco, por obra y gracia del espíritu santo, o del otrora Cardenal  Joseph A. Ratzinger.

La sencillez y el carisma del porteño han dado nuevas esperanzas a la Iglesia Católica, sumamente desgastada por los escándalos de abuso sexual. Marca una diferencia de estilo con los últimos años del papado, usando su crucifijo plateado de siempre y zapatos negros.

Juan Pablo II tuvo la mayor cobertura mediática de la historia de los Papas. La tecnología y sus tiempos así se lo permitieron. Su carisma fue mundial. Esto y sus alianzas estratégicas con Ronald Reagan y su compatriota Lech Walesa fueron determinantes en  la nueva dimensión de la Europa oriental sin comunismo.

El polaco descuido lo interno de la Iglesia, le faltaron medidas rígidas que si tomo su sucesor Benedicto XVI poniendo a ciertos cánceres en su lugar, como Marcial Maciel, verdadera imagen satánica, sin cuernos.

Desde luego que Joseph A. Ratzinger será el hombre cisma de la Iglesia, sin tener nunca el carisma de su antecesor, ni de su sucesor, pero la forma en que llego este al papado es la gran lección de sencillez y sensatez. No esperar a convalecer o que la muerte lo separe del trono es un acto extraordinario y ejemplar para la raza humana. No debe ser fácil dejar tanto para el bien de la causa, de hecho casi nadie lo hace.

Su presencia hizo histórico el conclave que eligió a Francisco a quien seguramente el vio como su mejor sucesor. El legado de Benedicto XVI es una gran cátedra política: Los cambios y las propuestas se hacen desde el poder y a tiempo

Un cardenal enfrentado

El porteño se hizo de fuerza, carisma y poder desde la diócesis de su ciudad natal. Las misas con desayuno incluido en los asentamientos irregulares y más pobres de la periferia bonaerense hicieron que su pueblo creyera en un sacerdote que se caracteriza por llegar a su gente, y no esperar que lo visiten en su Iglesia.

Sus críticas a la pobreza argentina y a la corrupción del gobierno desde Néstor Kirchner volvieron los dimes y diretes entre ambos una relación imposible, al grado que el Presidente argentino y después su esposa en e l mismo puesto, evadieron asistir en Buenos Aires durante años al Tedeum, (Una misa católica especie de día de acción de gracias estadounidense, muy común en Sudamérica.) asistiendo a Provincias con sacerdotes desconocidos o afines a ellos.

Al ser electo Obispo de Roma, lo primero que hizo fue regresar personalmente en un taxi al hotel donde se hospedó durante el Cónclave y pagar su cuenta. Cambiar el trono Papal de los actos oficiales el cual fue invadido por un niño, que a cambio recibió una caricia y un gesto amble.

Reasignar un Secretario de Estado Vaticano y poner un administrador de su confianza en el Banco Vaticano son señales de desear cambiar y mandar. Jesuita al fin tiene que revolucionar, sino ¿Para qué estar ahí?

Los astros se alinean a favor de Francisco, quien hace unos días recibió a una comitiva del Club Atlético San Lorenzo de Almagro, que fue a presentarle su trofeo de campeón argentino a su hincha más famoso. Por cierto Ratzinger es del Bayer y Juan Pablo II del Barcelona, como verán hasta un Papa se equivoca. 

p.d. ¿Quién es para ti el hombre del año mexicano?

Mi tweet es @fernandezmuniz8