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Confirmado: detrás de las marchas estudiantiles en contra del rector de la BUAP está César Bermúdez, “El Gallo”, quien trabaja en la secretaría de Gobernación Municipal y está ligado a Guillermo Nares Rodríguez, quien salió desde hace un año de la Facultad de Derecho de la BUAP.
No sólo eso. Se sabe que detrás de los desalojos de los alumnos que mantenían un plantón en el zócalo, también está la mano de “El Gallo”.
En Rectoría ya saben por qué él y su gente intentan desestabilizar a los universitarios. Lo malo es que muchos jóvenes que se compran ideas de “izquierda” y son fácilmente manipulables caen en la trampa y van a hacer manifestaciones afuera del Carolino.
Algunos guerrilleros de internet también se han comprado la especie, pero es un hecho: Alfonso Esparza nunca mandó a desalojar. Tampoco ha mandado a golpear a grupos opositores, ni ha reprimido manifestaciones.
Tampoco lo alienta.
Simplemente sabe, porque él también estudió en la UAP, que es parte de la época y es parte del momento para que hagan sus manifestaciones.
A mediados de enero, en la visita del presidente Peña Nieto a Puebla, para inaugurar el Hospital del Niño Poblano, hubo una serie de detenciones contra un grupo de alumnos que se manifestaron. Posteriormente, otro grupo de jóvenes fueron al Carolino a hacer presión contra Esparza para exigirle que “fijara una postura más radical contra la administración morenovallista”.
En este mismo espacio ya se había descubierto la mano negra del “Gallo”.
Esparza en ambos casos, sólo ha buscado apoyar a los universitarios pues primero puso a disposición el Bufete Jurídico para defender a los estudiantes que fueron detenidos en la manifestación contra Peña Nieto y en segundo fue a pedirle al procurador Víctor Carrancá investigue quien desalojó y golpeó a los muchachos que estaban en el zócalo.
No se hagan bolas. El enemigo ya está identificado. El mismo que ahora opera desde Gobernación Municipal a espaldas del alcalde Tony Gali, porque el presidente municipal no tiene nada que ver con todo esto. Hasta donde se sabe mantiene una excelente relación con el rector de la BUAP. Y no se prestaría a un juego sucio.
La razón de “El Gallo” es venganza. Esparza dio de baja al jefe de Bermúdez, es decir Guillermo Nares y la segunda es que Bermúdez es el que crea la enfermedad y el remedio. Vieja política de ser el que pone el veneno y el antídoto. Volverse indispensable es la máxima.
Lo malo no es la estrategia, sino que te la descubran.
La pregunta que queda en el aire es ¿quién ordenó el secuestro de la consejera universitaria que soltaron en Cuernavaca? ¿Por qué ella? ¿Por qué de la BUAP?
En ese caso no se ha vinculado a Bermúdez, hay que decirlo.
Y es que los tiempos universitarios avanzan. La semana pasada se eligió al Consejo Universitario que ya es totalmente esparcista.
Se acabó, por fin, con el agüerismo.
Este nuevo órgano de dirección ya está funcionando al cien por ciento. Y pasó sin incidentes gracias a la habilidad de René Valdiviezo y un equipo de jóvenes que trabaja en su área.
Y todo esto pone nervioso a algunos que se fueron relegando.
Una acotación más: la verdad es que la última marcha en contra del rector tuvo poca participación.
El enemigo no está adentro.