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Tan solo fue cuestión de horas para que Carmen Aristegui se convirtiera en la mártir de la comunicación en nuestro país, en un inicio la nota para mi era interesante desde el punto de vista de MVS y que hasta cierto sentido tenía lógica, nadie puede servir a dos amos y el hecho de que el equipo de investigación de Carmen Aristegui filtrara información para "mexicanleaks" es un tema penado en cualquier medio porque viéndolo de esta manera como ejecutivo de la estación, ¿quién sería prioridad en el caso de que el equipo de investigación diera nuevamente con una nota como la Casa Blanca del Presidente? En periodismo cuenta mucho el que pega primero y es verdad, este canal de cables y documentación no se compara en nada con el análisis y seguimiento de la comunicadora pero definitivamente en el medio cuenta mucho quien fue el primero que da la nota. Revisando en aquellos días la noticia, los ejecutivos de MVS atinadamente argumentaban que inclusive el punto en conflicto tenía que ver con que los reporteros utilizaran los recursos y acreditaciones de MVS para buscar información que se filtraría primero en "Mexicanleaks" antes que en MVS, eso sea Carmen Aristegui o quien sea sin duda para un medio de comunicación es suficiente para promover una separación del cargo.
Ahora bien, la situación se complica y si el Estado no estuvo tras de este conflicto, aunque quizás muy en el fondo deseaba que esto sucediera, hoy tiene a la gente en las calles señalando al gobierno como el principal promotor de la situación, ¡en mala hora tenía que suceder esto! pensaría como funcionario si ahora tengo a todo el país señalándome como culpable cuando quizás esto en realidad es un conflicto entre particulares.
Lo cierto es que ningún líder de opinión puede desaprovechar este boom en la opinión pública y presentarse como víctima cuando ves en las calles el apoyo de tanto ciudadano que no solo se ha volcado en las instalaciones de MVS, sino en distintas partes del país.
¿Se merece Carmen Aristegui estas movilizaciones sociales? nunca pondré en tela de juicio el gran valor periodístico de su trabajo, que por su compromiso la ha convertido sin duda en la periodista más importante de nuestro país pero lo que los mexicanos debemos salir a manifestar a las calles no es la censura a una periodista, en caso de que éste fuera el motivo, sino en realidad la censura en sí de la información en cualquier medio, es muy peligroso idolatrar de la manera que se hace a una periodista cuando estos son un vehículo entre la realidad y la opinión pública, jamás los protagonistas y una de las cosas que debe cuidar todo reportero es nunca convertirse en la noticia. Pese a que su investigación fue atrevida y de gran valor, la Casa Blanca siempre fue la nota principal, quien lo descubrió fue un segundo plano, muy comentado pero siempre en segundo plano en ese momento Aristegui no fue más que la Casa Blanca. Así es como debe de ser todo manejo periodístico pero todos somos seres humanos, y la idolatría que en muchos lugares se ha dado en favor a la reportera, si en realidad tiene como fondo intereses entre particulares, debe ser manejado con mucho cuidado e incluso de manera responsable por la comunicadora quien puede caer en la tentación de usar esta opinión pública a su conveniencia.
Me extraña que la gente salga a las calles por una reportera cuando en realidad si queremos criticar la censura esta marcha debería ser permanente no solo por un despido, tantas historias de corrupción que vemos a diario, tantas notas que se quedan cortas en el planteamiento, tanta información que vemos diariamente, que comentamos en las charlas de café acerca de su dudosa veracidad o explícita manipulación y nunca hemos salido a las calles y hoy lo hacemos, subrayo el valor y la fuerza de la opinión pública pero no metamos las manos por un reportero hagámoslo por nosotros y como sociedad.
Finalmente amigo lector le comparto mi teoría por supuesto que pensé acerca de una posible decisión del Estado por sacar del aire a Aristegui, y lo dejo a consideración de cada uno de ustedes a manera de analogía, supongamos que el mejor jugador de fútbol del mundo decide por motivos personales renunciar a su equipo y queda libre de compromisos, ¿cuántos harían hasta lo imposible por sumar a sus filas a este jugador?, ¿Cuánto representa en raiting Aristegui?, ¿qué empresa informativa no recibiría a la reportera con los brazos abiertos?
Para mi lo curioso y sospechoso es que ningún medio levante la mano para invitar a Aristegui y a su equipo de trabajo a colaborar con ellos y por supuesto recibir el raiting que produce la comunicadora, esperemos en las próximas horas pero sin duda ésta sería una sospechosa coincidencia.
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