¡Qué ternura! Ella es Meztli, la perrita que se ha hecho viral en redes por viajar en el Metro de la Ciudad de México dentro de un garrafón para agua en lugar de usar una transportadora convencional.
La creatividad de su dueño lo llevó a adaptar uno de estos garrafones para que su mascota viaje cómodamente durante sus traslados y vaya que nos dejó sorprendidos ya que nunca hubiéramos pensado en llevar a cabo esta idea.
La pequeña pastor ganadero australiana de tonalidades gris, negro y blanco tiene su propia cuenta de TikTok en la que suben videos para presumir sus aventuras en la capital, incluso al interior del sistema de transporte Metro, el más concurrido y utilizado por los chilangos.
Como mencionamos, su transportadora es poco convencional. El mismo dueño de Meztli compartió un tutorial en el que explica cómo fue que adaptó este garrafón en el que ella viaja cómodamente y al parecer disfruta mucho, ya que no se muestra inquieta y no ladra.
El garrafón cortado por la boquilla, tiene dos pedazos de madera debajo para evitar que ruede por doquier y el dispositivo da tanta confianza que incluso los policías que resguardan los acceso del metro le dan chance pasar a ella y su dueño sin ningún problema.
Algunos usuarios de TikTok la han nombrado la “dogafon” debido a la marca de agua potable que se distribuye alrededor del país. Vaya que está historia ha sorprendido a muchos y todos han comenzado a compartir su contenido.
No sólo eso, la perrita es tan obediente y bien portada que también sube historias sobre su día a día, que la muestran por algunos de los lugares más turísticos de la capital del país, como el Monumento a la Revolución, Bellas Artes, la Torre Latinoamericana, el zócalo y la transitada calle Madero en el centro de la ciudad.
Investigación revela que lomitos pueden distinguir entre idiomas
En enero de este año, REVISTA RAYAS te informó que los perros pueden detectar el habla y mostrar diferentes patrones de actividad ante un idioma conocido y otro desconocido.
De acuerdo con información de El Universal, una investigación de la Universidad Eötvös de Hungría demostró que un cerebro no humano puede diferenciar dos idiomas.
El origen de esta investigación fue Kun-Kun, el perro de una egresada de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Laura Cuaya, quien ahora vive y trabajar en Budapest.
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