Bien dicen que una crisis puede ser un momento de oportunidad. En CENTRAL aprovechamos la que vivimos desde el año pasado. Debo agradecer a esa persona que impulsó a que todo esto sucediera.
A aquella persona que vendió información de nosotros, que filtró datos y más datos para que el gobierno de Miguel Barbosa nos chingara. A esa misma persona que ahora anda filtrando un supuesto periódico de bolsillo que según hicimos. A esa persona que se la pasó diciendo de mesa en mesa que CENTRAL iba a desaparecer, solo le deseo que le vaya bien en la vida.
En fin, creo que no tiene caso hablar de aquellas personas que no son felices o que basan su felicidad en querer chingar a los demás. Aprendí que esos alacranes o alacranas siempre existirán, pero solitos se van haciendo daño. Su veneno, sus frustraciones y sus traumas les van pudriendo la vida poco a poco.
Pero bueno, pasemos a las noticias, a las que sí son buenas noticias.
Hoy estamos felices porque después de meses de trabajo concretamos CENTRAL Hidalgo. Hoy arrancamos este primero de muchos proyectos de expansión. Quiero agradecer a mis amigos hidalguenses que nos brindaron la oportunidad para trabajar juntos.
Quiero agradecer a la familia Ríos Andraca por creer y apostar una vez más en los proyectos para que CENTRAL siga de pie y seguimos aquí, de pie por la convicción de mantener vivo un proyecto y un legado. Hay quienes se venden por unos pesos, otros más creemos en los valores como la lealtad, el honor, la amistad.
Y precisamente hablando de amigos, de grandes amigos. También aprovecho para agradecer a los diseñadores de esta casa editorial que hicieron posible este diseño. Sam Navarrete, Leo Delgado y la amiga Angie.
Quiero agradecer y desearle mucha suerte a Bryan Rivera, quien confió en nosotros para tomar la batuta del proyecto, explorar nuevas tierras y dirigir el medio de comunicación en aquel estado. Sé que le irá muy bien.
También aprovecho para extender un reconocimiento muy especial y toda mi gratitud, admiración, respeto y profundo amor que le tengo a David Arroyo. Él regresó a CENTRAL, a su casa, después de un periodo de 4 o 5 años. Pero ahora regresa como los grandes y en nadie más podría confiar para este proyecto.
Gracias a nuestros amigos reporteros de Hidalgo que también están confiando en nosotros. Gracias a la niña Ross por animarse a explorar oportunidades fuera de Puebla. Estoy seguro que juntos haremos un gran equipo; abriremos más puertas y haremos que el periodismo que hace esta casa editorial sea un sello en varios estados.
Gracias a todos los amigos que siempre están con nosotros, que nos quieren y nos echan porras. Aprovecho para expresar toda mi gratitud al amor que me brindan Liz Cervantes y Agustín Hernández de El Referente; Paty Corro de Alcance Diario; Paulo Yolatl de En Línea.
Angélica Patiño y Alejandro Camacho de Espacio Libre Puebla; Toño de la Vega de En Punto; Chucho Lemus de Faro Digital; Alejandro Hernández Limón de Curul. A mi amigo Julio; a Ernesto Aroche de Lado B; Magaly Herrera; Elvia Cruz; Héctor Hugo y mi tía Pau; Arturo Márquez; mi amigo Erick Bortolotti; Alejandra Gutiérrez; Hervey Rivera.
Y a todos mis amigos que siempre están conmigo.
También aprovecho para reconocer a las personas que hacen CENTRAL todos los días y que me aguantan. Que aguantan mi “dispersión”, distracción y todos los defectos que tengo. Laura Valderrábano, Lupita Bravo, Humberto Pérez Rodríguez, Fer Ugarte, Violeta Flores, Lucio, Jaz, Mariana Camarillo que se enoja porque me enojo, el niño Angelito, Carlos Cózatl, Claudia Hernández, Jesús Palma, Jesús Razo, Alan de Magneto, Abel Mbappé.
A mi Tía Mundis que nos hace muy agradables todos los días y a la amiga Dania que siempre está ahí para apoyarnos. Claro no podían faltar doña Soco, don Chilolo, Irlanda, Andrea, Kimy. Mi mamá y mis hermanos. Mención aparte, la Niña Mota, Gaby Pérez Bazán y María López.
CENTRAL tiene un nuevo hijito; seguramente desde el cielo Selene Ríos Andraca está llorando de la felicidad. Ha costado levantar y mantener su legado, pero aquí sigue de pie.
CENTRAL es más que una persona, para mí, CENTRAL son todos mis amigos.
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