La línea entre lo bueno y lo malo es muy delgada.
Entre lo correcto y lo incorrecto.
El hielo sobre el que caminan los políticos entre acciones de gobierno y promoción política, es muy delgado.
Lo que me sorprende es que algunos actos anticipados de campaña o promoción política son avalados, mientras que otros censurados y hasta motivo de denuncias.
Insisto, es muy delgada esta línea. Pero ustedes mis estimados lectores, tendrán una mejor percepción que la mía, solo vean la siguiente foto:
¿Qué es lo que ven?
Sí, muchos dirán que ven a la flamante secretaria de Economía, Olivia Salomón con muchas mujeres en el programa “Mujer es poder” en Teziutlán. Pero no olvidemos que la funcionaria ya se destapó como aspirante a la gubernatura.
Entonces, mucha gente puede pensar que la secretaria está cumpliendo con su encomienda de secretaria, pero no sé ustedes, al menos para mí, se trata de una promoción y me imagino que está usando la dependencia para promocionarse.
Por eso les digo es muy delgada esa línea ¿Qué o quién nos dice que no está usando los recursos públicos para promocionarse en nombre de los programas que implementa?
En fin. La hipotenusa.
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Y otra hipotenusa es la regidora de San Martín Texmelucan, Hilda Cortés que en nombre de Dios trabaja para los texmeluquenses. Y no es broma, me enteré que el párroco del centro del municipio, Rafael Hernández le dicta la línea de Dios nuestro señor.
La regidora tiene que consultarle todos los días qué es lo que tiene que hacer. Cómo buena samaritana, el párroco le dice cómo estar en comunión con Dios y con él. Al rato el padre y la regidora van a querer quemar a mi Norma Layón en leña verde en pleno zócalo como en la Santa Inquisición.
Yo no sé ustedes amigos ateos, pero si hay algo peor que nos obliguen a ir a misa todos los domingos y fiestas de guardar, es que los líderes religiosos quieran intervenir en asuntos de gobierno.
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