Me cuentan y no lo creo.
Neta de pronto siento que ya son muchos excesos de Amanda Gómez, pero mis amigos me dicen que es cierto.
Cada palabra, cada frase, cada oración son ciertas. De antemano y para que Amanda Gómez vea que no la criticamos solo por criticarla, le agradecemos que haya devuelto el dinero de la cena de Navidad a los trabajadores de la Auditoría Superior del Estado.
Pero una golondrina no hace primavera. Pues resulta que a Amanda se le ocurrió citar a los diputados en la auditoría, les pidió su sello, dijo que no podían llegar sin sus sellos de recibido.
El objetivo de esta solicitud es para que sellaran de recibido sus medidas apremiantes. Sí, Amanda Gómez quería poner o puso medidas apremiantes a sus jefes, los diputados. Estas medidas son sanciones o infracciones.
También puso medidas apremiantes a los auditores externos y a los alcaldes. A todos los entes fiscalizables, y como les digo, a sus propios patrones.
Y apenas este fin de semana, tuvo una comida con sus colaboradores y aprovechó para que les dieran un curso de fiscalización. Porque hay muchas quejas de que no saben nada y es que recientemente contrató a 30 personas, principalmente en el área de fiscalización.
En fin, así las cosas en la ASE.
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¡Así no Aurora, así no!
Me comentan que la diputada del PAN, Aurora Sierra anda enojada, que no la calienta ni el sol y llena de envidia porque todo el mundo reconoció la iniciativa de Néstor Camarillo sobre la violencia ácida, todos menos ella.
Resulta que Olimpia Coral, Las Brujas del Mar, y otras activistas sociales han reconocido la iniciativa que presentó el priista para tipificar como intento de feminicidio la violencia ácida.
Entonces, al parecer le dio celos y por eso ahora se niega a reconocer el trabajo de su compañero.
dando clic en el periódico