El fenómeno social en el que los mexicanos de forma extraordinaria y hasta heroica podemos solidarizarnos como una unidad cuando vivimos una tragedia es irónicamente opuesta a la gran discriminación que tenemos hacia nosotros mismos y los grupos que componen nuestra estructura social.
Lo puedo comprender como herencia histórica al ser un país conquistado en donde inicialmente fomentar en nosotros esa capacidad de mirarnos con odio fue clave para que una nación invasora que representaba un porcentaje muy bajo no fuera expulsada del país ante una posible sublevación de pueblos indígenas que unidos conspiraran contra los conquistadores.
Pese a expulsar a los conquistadores, los nuevos gobernantes mantuvieron y formalizaron la diferencia de clases en donde el sistema determinaba quienes eran merecedores a las oportunidades para lograr su desarrollo.
La diversidad es la riqueza que muchas marcas han aprovechado para el éxito
Pero avancemos en el tiempo y veamos a nuestro país en la actualidad y la enorme diversidad en la que vivimos y la eterna pugna en la que vivimos. Exponía hace tiempo en una conferencia la filosofía de Nike, empresa que ha sido exitosa a nivel mundial y que una de sus claves ha sido fomentar la diversidad, sí aquello que nos separa es para otros su oportunidad para competir.
Como filosofía esta marca aprovecha los diversos puntos de vista que provienen de distintas razas y pensamientos para construir productos universales.
Pensemos en la riqueza que tenemos en nosotros, en la cultura, arte, deporte, política y más. La auténtica revolución puede construirse directamente a nivel ideológico y la transformación tan necesaria que requiere nuestro país puede provenir de la diversidad, de aquello que nos separa pero que también puede ser lo que nos una.
¿Cómo comenzar?, hablemos de valores y hablemos del respeto y la tolerancia, veamos como una fortaleza el que existan puntos de vista diferente y disfrutemos estas maneras distintas de ver el mundo.
Todos pretenden el mismo fin, una oportunidad para crecer y ser felices, si encuentran el camino no perderán el tiempo lastimando a los demás porque es un fin natural de todo ser humano pero ¿qué pasa cuando algo obstaculiza ese camino?, por derecho la respuesta puede darse incluso de manera violenta y al ser todos parte de un sistema no hay ningún mal que le ocurra a otro que tarde o temprano no pueda afectarme.
Es más complicado amigo lector obstaculizar que facilitar y mi visión sistémica aplica también en el que un bien que ocurra para alguien tarde o temprano puede replicar en mí y mi realidad.
¡Qué interesante ejercicio es pensar en lo que podríamos lograr promoviendo la diversidad!, lo vemos en el arte con la danza, ¡qué orgullo es mirar tantas danzas diferentes que han surgido en nuestro país en todas las regiones que componen a nuestro México!, ahora migremos esta misma apertura para la política, la ciencia o el terreno social.
¡Tanto que podemos lograr con el simple hecho de escuchar, ser empático y facilitar!, una buena tarea para poner en práctica y mirar el resultado inmediato que podemos lograr.
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