Miguel Barbosa Huerta, gobernador de Puebla, debe estar muy de buenas.

Y aunque es un amante de la música clásica, seguro en su lista de Spotify, en su playlist de YouTube o en el carro le pedirá a su chofer esa rola de Miguel Bosé: “Morena mía”.

Porque así resultó la cosa. El partido Morena en Puebla es prácticamente suyo, con los 116 delegados que consiguió para el Consejo Estatal tras la operación del sábado 30 de julio que comandaron personajes como Julio Huerta, Andrés Villegas y hasta Jorge Mota (que, por cierto, todavía mandan a decir que pase a pagar lo que debe).

Y es que dejó prácticamente en ridículo a sus contrarios, llámense Rodrigo Abdala, Claudia Rivera, Ignacio Mier o un largo etcétera. Personajes que quedaron muy, pero muy lejos de asumir el control de facto en el partido.

El despliegue territorial en Puebla fue impresionante, y pareciera que lo que ocurrió en Puebla con el caso del gobernador Miguel Barbosa Huerta llamó la atención a nivel nacional.

Y es que, recordemos, el movimiento del sábado también implicó la suma y acumulación de simpatizantes al partido.

Si antes el poder de Morena era de tener cuidado, después de lo visto el sábado los partidos como Acción Nacional deberían de trabajar a triple ritmo rumbo al 2024.

¿Qué personajes pueden mover a más de 100 personas por sí mismos en un distrito sin tener afinidad previa con Morena? ¿No debería eso preocuparles a los otros partidos?

La investigadora del Colegio de México, Violeta Vázquez-Rojas, en una interesante plática con “Los Periodistas”, programa conducido por Álvaro Delgado y Alejandro Páez Varela, explicó precisamente que después de esta jornada escuchamos muchas narrativas extremistas en donde se plantea a Morena como “El nuevo PRI”. Narrativas que simplemente ya sabemos de dónde vienen.

Estas narrativas son el análisis básico y simplista. Perdemos de vista que el padrón de Morena seguramente será a partir de esta jornada electoral uno de los más fuertes para el 2024.

Antes que señalar algo tan básico, los otros partidos políticos podrían empezar a ubicar cuál es el verdadero poder de este partido rumbo al 2024.

Otra anotación a destacar de la investigadora, es que Morena siendo un partido que se asumió con una base ética distinta no puede ser orgulloso portador de aquellos delitos electorales que incluso propuso tipificar como delitos graves.

A esto hay que sumar que también, Citlali Hernández,  Secretaria General de Morena, informó en varios espacios mediáticos que después de la elección de los aproximadamente 3 mil consejeros a nivel nacional, tendrán que revisarse las listas de los electos, checar casos individuales pues los puestos implican a quienes darán rumbo al partido en el panorama del complicado año electoral del 2024.

Para Citlali Hernández es básico limpiar los casos en que hubo prácticas cuestionadas y atribuidas a los antiguos partidos hegemónicos.

Claro. Ahora Morena es el partido hegemónico e iba a ser una tomadera de pelo si creíamos que con todo lo que viene a juego no veríamos filas enormes en los centros de votación o movilización de votantes.

Mientras tanto, Morena en Puebla ya sabemos a quién tendrá que obedecer. Y con quién tendrá que pactar la cúpula nacional del partido guinda al momento de enviar al próximo o próxima que buscará la gubernatura en 2024.

Ah, por cierto, mandaron decir que ese tal Eric Cotoñeto ya ni pintó en la operación del sábado 30 de julio.

Que en la estructura de Barbosa ya ni lo topan.

Y que ya todos saben por qué…

Tehuacán, ¿al fin llegó la coordinación?

La fuerte movilización policial de la noche del 26 de julio del 2022 en Tehuacán no fue de a gratis.

Tampoco fue una mera casualidad.

Días antes pusieron las cosas bien claras para los grupos de seguridad pública en la región. Y hablo de los Policías Estatales, Municipales y Ministeriales.

Hubo indicaciones de muy alto nivel para que, de una vez por todas, se enfriaran las cosas en el municipio, tierra de donde el gobernador Miguel Barbosa Huerta no aparta la mirada.

Después de ese jalón de orejas los titulares de todas las áreas de seguridad fueron por su kilo de huevos, porque les hacían mucha falta.

Y vino la detención de tres delincuentes al parecer implicados en la matanza del bar El Potrero.

Ahí que no duden que vengan más cambios en las estructuras de seguridad en la región de Tehuacán.