Dicen que a fuerza ni los zapatos entran.
Y la gente que participó del equipo y el cabildo de Puebla con la administración de Eduardo Rivera Pérez esperaba tener una oportunidad en el proceso interno de Acción Nacional para buscar su reelección.
Y entre esos nombres y apellidos hay cuates, compadres, esposas, amigas, primos y parientes antes que funcionarios efectivos que sirvieron a la ciudadanía y abrieron brecha junto con el hoy candidato a la gubernatura por la coalición Mejor Rumbo para Puebla.
Sí y ahí le van los beneficiarios del proceso que no se acaba.
Amparo Acuña, esposa de Jesús Zaldívar; Vanessa Rendón, hija de Julián Rendón; Alfredo Ramírez , recomendado del grupo compacto panista.
Otros son Luis Franco y Ricardo Grau, cercanos amigos de Mario Riestra; José Luis Carranza, asistente de Néstor Camarillo y Shirley Ponce, amiga de Néstor Camarillo.
Y así otros nombres ya muy conocidos son como Lupita Arrubarrena, Oswaldo Jiménez y un etcétera que podría indignar a varios más.
Pero eso, en breve se conocerá y esperemos que más panistas que sí funcionaron en la administración que está por finalizar no terminen igual de desilusionados.
Grace Palomares y la desilusión en Morena
Hablando de desilusiones, también en Morena el proceso interno está llevando a los límites del desgaste.
Muchos esperaban que Mario Montero Rosano se quedara con una candidatura a diputado local por el Distrito XVII de Puebla Capital.
Y todo parece indicar que Elvia Graciela Palomares, mejor conocida como Grace Palomares, llegue a esa posición.
Grace Palomares de la nada guardó los fosfo-fosfo y como no pegó en Movimiento Ciudadano ahora le tiró a la segura con Morena.
¿A qué le debe su llegada Grace Palomares a Morena?
¿Qué le pasó con el partido Naranja Naranja?
Nara na na na… Les dijo Grace a varios dentro del partido de Dante Delgado. Por años se presumió colaboradora cercana del gobernador Enrique Alfaro, después fue de todos conocida su contribución en el Senado con Noé Castañón Ramírez que le prometió hasta una alcaldía en Chiapas, después se dio un ente con Fernando Morales por el control de MC en Puebla.
Buscó la candidatura al gobierno del estado, después la capital y después nada… Le tiró a lo que fuera. Muy a su estilo.
Le metió color al naranja y ahora llegó Morena.
¿A quién en Morena le debemos tal fichaje?
Eso, como dice el clásico, merece otra historia y deberá ser contado en otro momento.
Nara na na na.
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