La decisión de que la comunidad de la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP) no retome sus actividades en el campus obedece a intereses ajenos a la institución, acusó el patronato encabezado por Horacio Magaña Martínez. Reiteró, además, que Cecilia Anaya puede tomar el campus sin implicaciones legales.
Lo anterior luego de que la rectora interina, Cecilia Anaya Berríos, informó que no tomará las instalaciones hasta que la devolución se realice mediante los canales y mecanismos que la propia ley establece y sea directamente a la dirección histórica.
El nuevo patronato señaló que, con la consignación de la posesión plena del campus y sus accesorios en beneficio de Anaya Berríos, no existen obstáculos legales que impidan al personal directivo y administrativo participar e involucrarse en las actividades normales.
Al negarse a asumir la posesión jurídica, consideran están privilegiando a quienes se encuentran sujetos a procedimientos de carácter penal, en lugar de velar por el interés de la comunidad universitaria.
Cualquier excusa del personal directivo y administrativo para no presentarse al campus responde únicamente a intereses ajenos a los propósitos de la UDLAP.
Piden que la UDLAP no se utilice como instrumento de presión
Reiteraron el llamado a que la UDLAP no se utilice como instrumento de presión para negociar la impunidad. Esto debido a las ordenes de aprehensión que existen en contra de integrantes de la familia Jenkins por el desfalco de 720 millones de dólares de la Fundación Mary Street Jenkins.
Desde el pasado 8 de febrero, se dio a conocer que Cecilia Anaya Berrios podrá asumir la posición jurídica y material de la UDLAP, pues el representante legal del patronato, encabezado por Horacio Magaña Martínez desistió de la acción civil que promovió ante el Juez 24 de la Ciudad de México.
En entrevista con CENTRAL, Adalberto Ramos Huerta, secretario del patronato, reveló que será un juez en materia civil del estado de Puebla, quien hará la entrega oficial del campus, a pesar de que Cecilia Anaya Berríos estará el frente de la universidad, el patronato de Magaña Martínez seguirá vigente.
Explicó que la liberación tiene el objetivo únicamente de dejar a la universidad fuera del conflicto legal por las acciones que se iniciaron en contra de los miembros de la familia Jenkins y de sus abogados por haber desviado el patrimonio de la fundación.
Sin embargo, el patronato encabezado por la familia Jenkins y la rectora interina, Cecilia Anaya Berríos, acusaron que la dirección de Magaña Martínez pretende simular la entrega del campus ante la opinión pública y la comunidad de la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP), esquivando las responsabilidades y quebrantando el patrimonio.
Indicaron que es apócrifo el comunicado emitido donde se asegura que, en vía de jurisdicción voluntaria, se consignó ante un juez civil la posesión plena de la institución y de todos sus accesorios a Cecilia Anaya Berríos.
dando clic en el periódico