Como sabes, los temas de violencia de género y de empoderamiento femenino son parte de mi quehacer cotidiano no sólo como psicoterapeuta, sino como mujer. Tenía varias semanas pensando la manera de hacer una radiografía de cómo se ve un manipulador emocional y de cómo podemos detectar de manera temprana su presencia para poder desistir y no ir cediendo ante sus insinuaciones o influencia. A partir de lo ocurrido a Jessica, quien tristemente se convirtió en noticia a partir de ser asesinada por Diego, un chico en quien ella confiaba y que le gustaba, me pareció pertinente escribir esto lo más pronto posible para que cada vez haya menos mujeres que mueran a manos de un sociópata misógino. Las primeras señales están ahí siempre, incluso, nuestra intuición puede decirnos que hay algo mal en esta persona, sin embargo, los manipuladores emocionales son expertos en hacerte dudar de tu criterio; se van metiendo en tu vida de manera muy sutil, casi gradual, como la humedad, y muchas veces, cuando te das cuenta, ya es demasiado tarde.
Entonces, ¿qué caracteriza a un manipulador emocional?
1.- TIENE VERBO: suelen ser personas que hablan con mucha facilidad y que se expresan con mucha convicción de sus pasatiempos, sus creencias, etc. Incluso pueden llegar a ser “muy claros” con respecto a sus expectativas en una relación, pero ¡cuidado! Esta es una primera herramienta para manipularte pues más bien, siempre te dirán lo que quieres oír.
2.- TIENE CARISMA: puede no ser el hombre más afortunado físicamente; sin embargo, tiene “un algo” que lo hace atractivo. Puede ser que tenga mucha personalidad, que sea gracioso, o que siempre tenga comentarios ingeniosos qué decir. Parece una persona divertida o interesante con la que quieres pasar el rato.
3.- ES UN GRAN MENTIROSO: aquí ya empezamos mal. Estos sujetos suelen ser mentirosos compulsivos y patológicos. Mienten de todo y por todo, desde qué comieron ayer hasta con quién comparten su vida y su tiempo. Normalmente, son personas que pueden tener una doble vida sin sentirse culpables por engañar o mentirle a la gente que los quiere. Esto se debe a sus características narcisistas y psicopáticas: no experimentan culpa, sino que se enfocan en el gozo que les produce victimizar, explotar y manipular a otros. Es común que a lo largo de la relación o de la convivencia con él, comiences a captar algunas incongruencias en sus historias o que te aplique el clásico “sí te dije” cuando en realidad no te dio esa información y sólo te haga dudar de tu percepción.
4.- ES EGOCÉNTRICO: todo se trata de él, por él y para él. Y en ese sentido, siempre va a exigir tu total atención, consideración y afecto. Cuestionará tus actitudes o decisiones y es probable que te pregunte cosas como “¿no me amas suficiente?” o que te condicione con frases como “si te importara nuestra relación no harías eso”. Para este tipo de individuos, todo es personal, desde tu actitud hacia él hasta tu vestimenta, tus amistades, etc., todo se trata de darle gusto o “de molestarlo”, por lo cual, irá metiéndose en tus actividades y decisiones.
5.- USA EL SILENCIO PARA MANIPULAR: son excelentes para zafarse de una pelea manteniéndose en silencio; de esta forma, tú “te peleas sola” con alguien que no está retroalimentando tu enojo o tu diálogo. Te dejan hablar permaneciendo callados y posteriormente, tratarán de irse o de eludir la discusión. Esto tiene que ver con hacerte sentir culpable después porque, cuando él no reacciona ante tu estado emocional, entonces tú quedarás como la exagerada, la loca o paranoica por sospechar de su lealtad. Esto también lo hacen porque hay un punto en el que ya no pueden mantener en la memoria todo el trayecto de sus mentiras, así que se quedan callados para no “regarla” diciendo algo que contradiga sus mentiras anteriores. Una dinámica así repetida, te hará eventualmente dudar de tu percepción, de tu intuición e incluso de tus valores.
6.- IGNORA TUS SENTIMIENTOS: ya sea que estés llorando, o que te encuentres molesta, triste, angustiada o en cualquier estado emocional que le resulte incómodo, hará lo posible por ignorarte. Es posible que cambie la conversación a algún tema de su interés, haga un chiste sobre tus emociones, que suba el volumen de la música o la televisión, o incluso que tome una postura más agresiva diciendo que “le dan flojera tus dramas.” Pero siempre tratará de evadir la responsabilidad de causarte dolor, incertidumbre, angustia o de haberte lastimado.
7.- CUESTIONA TU SALUD MENTAL: este es el siguiente paso de la manipulación por excelencia. Este sujeto te hará sentir tantas veces que estás loca, que en muchos casos vas a acabar muy confundida y creyendo que estás exagerando. Es probable que en varias ocasiones te diga cosas como “mira cómo te pones”, “estás mal, imaginas cosas donde no las hay”, “no me imaginé que fueras tan celosa y tan posesiva”, y entonces, te hará sentir culpable de expresar tus sentimientos. Muchas mujeres llegan a terapia porque su pareja las ha denostado tanto en cuanto a su criterio, que asisten a consulta para que alguien más pueda validar si tienen razón o si de verdad “están locas” como se los han hecho creer. Ojo aquí, porque si tu pareja está GENUINAMENTE interesada en tu bienestar emocional, te sugerirá ir a terapia o buscar ayuda profesional juntos. Si no es así, lo que hará será decirte que estás mal por buscar ayuda de un psicólogo o que con la terapia sólo vas a “quedar peor.” Esto surge porque él no quiere perder el poder o la influencia que tiene sobre ti, así que no permitirá que recuperes tu criterio y tu seguridad en tu juicio.
8.- NO ACEPTA SU CULPA: estos hombres son especialistas en evadir su responsabilidad, entonces, aun cuando lo caches con las manos en la masa, lo va a negar. Aún si le descubres con alguien más, encontrará la manera de excusarse o, peor aún, de culparte a ti de la situación: “si tú no fueras tan celosa, yo no habría buscado a otra persona.” Ojo, todos tenemos derecho de decidir seguir o irnos de una relación, y si no estás bien en tu relación de pareja puedes decidir terminar, por difícil que sea. Esto siempre es mejor a tener dos parejas, dos vidas, dos familias. Pero, como te digo, estos sujetos son tan patológicos que prefieren inventar cosas inimaginables -como que les hicieron photshop- que aceptar su responsabilidad y lidiar con las consecuencias de sus actos.
9.- TIENE UNA NECESIDAD ENFERMIZA DE CONTROLARLO TODO A TU ALREDEDOR: como suelen tener una doble o triple vida, necesitan tener mucho control sobre sus parejas para no encontrarse o para no verse descubiertos, así que constantemente te enviará mensajes preguntándote dónde estás, con quién, o qué estás haciendo. Eventualmente, empezará a ejercer presión para que salgas menos de casa, para que evites algunas actividades, te alejes de tu familia o amistades, porque en el aislamiento es dónde él tiene más control sobre ti. Como en muchos casos de feminicidio, te dirá que no le digas a nadie que te vas a encontrar con él en algún lado, y te argumentará que es porque tus amigas o tu familia no lo quieren, los van a juzgar, o que “no es necesario decirle todo a los demás”. Mucho cuidado con estas conductas pues suelen ser la antesala de la violencia e incluso del asesinato.
10.- SE RÍE DE TI: esta última característica es la más hiriente. Cada vez que tú expresas una emoción, una necesidad o un deseo, él se burla de ti. Se burla de tus sueños, de lo que te parece lindo o divertido. Se ríe de ti o se burla de tu aspecto físico para hacerte sentir insegura y no merecedora de cariño o de reconocimiento. Esta es la manera que tiene de socavar tu autoestima y de dañar tu autoimagen hasta el punto en el que creas que tienes mucha suerte de haberte encontrado con él y que te quiera. Hace comentarios hirientes a modo de broma sobre tu aspecto físico, te arremeda de manera humillante o se mofa de tu opinión en público. Esto constituye una forma muy violenta de relacionarse y, entre más toleres tú estas actitudes, más poder sentirá él que le estás dando en la relación.
¿Qué hacer?
Si identificas que tu pareja o alguien con quien estás empezando una relación tiene estas actitudes: HUYE. De verdad, tal vez parece buen tipo o es agradable en algunos momentos, pero créeme, no lo vale. En el mejor de los casos, acabarás una relación de años con alguien que todo el tiempo tuvo una doble vida y que no hizo más que mentirte -a mí me pasó, pero no vamos a quemar a nadie, aunque ganas no me faltan jaja-. En el peor de los casos, esto puede poner en riesgo grave tu integridad y tu vida. Detecta las señales, acude a tus seres queridos, busca ayuda psicológica y sal de esa relación. La vida es hermosa y un manipulador emocional es una sabandija chupasangre que jamás te dejará ser plena y feliz. Siempre es buen momento para empezar de nuevo. Estás a tiempo.
Como siempre, estaré atenta a todos tus comentarios y preguntas vía Twitter. Me encuentras como @betzalcoatl.
Aprovecho para comentarte que ya tengo podcast: lo puedes encontrar en YouTube, Spotify y otras plataformas como “Psicoterapia para llevar”.
