Thursday, 02 de May de 2024

Dios en el Poder

Martes, 10 Marzo 2015 01:49
Selene Rios Andraca

Moreno Valle contra las Gallinas Indocumentadas

Por :
  • Imprimir
  • Email

Columnas Anteriores

Días como hoy me remuerde un poco la conciencia pasarme la vida mirando el lado negativo del gobierno de Rafael Moreno Valle. En días como estos comprendo que si uno se detiene un poco, aprieta el resentimiento, olvida los agravios, elimina por un instante los perseguidos, los encarcelados, la Ruedota, los pobres, y así, puede uno disfrutar un poco de las ventajas del gobierno morenovallista.

A ver, inténtenlo lectores, inténtenlo conmigo. Cierren los ojos, respiren profundo. Oh chingá esto es serio ¿Por qué se ríen? Va de nuez.Cierren los ojos, respiren profundo, dejen fluir la buena vibra, la luz en su interior y gocen un poco de este gobierno que tantos desvelos, retortijones, dermatitis, corajes e insomnios nos ha dado y aprecien en todo su esplendor la grandiosidad del gobierno morenovallista porque al fin hizo un gasto en beneficio de los poblanos: chamaquitos, señoras, licenciadas, ñores, viejitos, ricos, pobres, fresas, nacos, wannabes.

¡Para todos los poblanos y hasta para los colados que andamos engrosando el número de habitantes de la entidad!  

Al fin puedo decir—y soportar de manera estoica cualquier tipo de improperios que lancen en mi contra y aguantaré con firmeza que me digan vendida, incongruente, centavera, cabrona, entregada y demás lindezas que quieran ponerme— que Moreno Valle y cómo no, hasta Enrique Peña Nieto hicieron la mejor inversión para Puebla: los Arcos de Seguridad de Huejotzingo y Palmar de Bravo.

Sí que sí.

El gobierno de Rafael Moreno Valle —con un varito de la federación— se gastó poco más de 343 millones de pesos para los armatostes que serán los encargados de resguardar nuestra seguridad, nuestra integridad, nuestra felicidad y por qué no, hasta nuestra salud.

Así como lo lee. Los Arcos de Seguridad —así con Mayúsculas, se lo han ganado, créanme—, que si bien costaron cada uno poco más de 170 millones de pesos cada uno y que parecen un gastotote espantoso en tecnología que no logramos comprender, ayer nos salvaron la vida.

Amén por los Arcos de Seguridad.

Es más, hay que echarles una porra —pero tipo chilpancingueño—:
A la triki tri-triki
¡Raaaaá!
A la triki tri-triki
¡Raaaaá!
A la bio, a la bao
a la bimbobá.
¡Los arcos de Seguridad de Rafa!
¡Los arcos de Seguridad de Rafa!

¡Raá, raá, raá!

—Qué emotiva porra ¿no? Apréndansela, porque luego cuando voy a fiestas, cumpleaños, XV años, graduaciones, bautizos y bodas, soy la única loser que grita “a la triki-tritriki” y nadie me hace el acompañamiento y la verdad, me siento mal, siento que aún no me adapto la vida en la ciudá, me hacen sentir como una prófuga del trópico guerrerense. En fin, no divaguemos en mis asuntos regio-emocionales. Ya habrá tiempo de sanar heridas y reconciliar mis costumbres chilpancingueñocosteñas con las poblanas—.

**
Mi mala fe por los Arcos de Seguridad comenzó hace unas semanas cuando la providencia me llevó a cruzar el armatoste ubicado en la México-Puebla y todas las veces que miré hacia la obrota de más de 170 millones de pesos, pensé ¿y para qué chingados sirve eso?

Incluso hice una prueba infalible para comprobar la efectividad de los Arcos.Minutos antes de cruzarlo hice cara de mala: fruncí el ceño, me rasqué la ingle, hablé de detonar una bomba en la casa del Preciso, de efectuar la operación “Maten al León” y hasta hice pistolitas con mis dos manos —¡con las dos!— para atemorizar al Arco de Seguridad y sus operadores.

Obvio, no pasó nada. Desde ese momento, mi mala fe me llevó a pensar que esas cosototas no servían de gran cosa.Pero bien dice Cercas que “uno no encuentra lo que busca, sino lo que la realidad le entrega”.

Y la realidad me tapó la bocota.

Ayer, el Señor Arco de Seguridad instalado en la México-Puebla impidió que los poblanos perdieran la vida con unas alitas enchipotladas, en un molito con pollo, en un pipián con pechuga y en un mole verde con muslos.

El Señor Arco de Seguridad detectó a 4 mil 800 gallinas sospechosamente peligrosas. (Aquí puede leer los pormenores de la captura y repatriación)

¡4 mil 800 gallinas!

Las muy infelices aves pretendían ingresar a la entidad gobernada por Rafael Moreno Valle ¡sin documentos!

Me explico:

El Señor Arco de Seguridad detectó quelas 4 mil 800 aves peligrosas eran unas indocumentadas, unas mojadas en tierra santa y las retachó a su pueblo, allá por el Estado de México.

Gracias al Señor Arco de Seguridad las 4 mil 800 gallinas no entraron a la entidad y no terminarán en ningún caldo tlalpeño de los hogares poblanos. Faltaba más.

El Señor Arco de Seguridad revisó a las indocumentadas y descubrió que ninguna de las 4 mil 800 aves tenían permiso ni documentación sanitaria que garantizara sus buenas costumbres, sus buenas intenciones, su educación y su salud.

Uff.

Esos 170 millones de pesos son los mejor gastados por Moreno Valle en 4 años y cachito de gobierno. —Confío en que el Arco de Seguridad inaugurado en Palmar tenga tantos éxitos como el de Huejotzingo—.

De una cosa estoy segura: Moreno Valle debe ser el presidente de la República Mexicana —cómo chingados no— pues sólo él, nadie más excepto él y él nomás garantiza que en México y en cada uno de sus rincones no haya ninguna pinche gallina indocumentada.

¡A hue…!

El 9 de marzo será recordado como el día en que Moreno Valle nos salvó la vida...

Miau rotundo.