Los casos de dengue en Puebla han experimentado un notable aumento en lo que va del 2023, en comparación al mismo periodo de 2022. Puesto que, entre enero y mayo, se registraron un total de 56 enfermos, que es 1020% más que el año pasado.
Con base en los datos de la Secretaría de Salud federal, esta cifra es mucho mayor este año, pues en el primer semestre del año anterior, hubo sólo 5 reportes.
De los 56 casos de dengue que se han reportado este año en Puebla, el 52% no han sido de gravedad. Mientras que el otro 48% son graves y con signos de alarma.
Hasta la semana 21 del 2023 se han registrado 29 contagios no graves, 19 con signos de alarma y sólo 8 clasificados como graves. Afortunadamente no se ha reportado ninguna muerte a causa de esta enfermedad.
A nivel nacional, Puebla ocupa la undécima posición en cuanto al número de casos de dengue. Está ubicado detrás de Quintana Roo, Yucatán, Veracruz, Guerrero, Tabasco, Chiapas, Morelos, Oaxaca, Colima y Sinaloa.
De acuerdo a la distribución por regiones del estado, Acatlán encabeza la lista de municipios con más casos. Luego de que tiene un total de 22 registrados hasta el 5 de junio del 2023, de los cuales 7 son no graves y 15 se consideran graves o con signos de alarma.
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En tanto, Tulcingo del Valle acumula 4 casos, de los cuales 3 son de gravedad y requieren cuidados y uno es no grave. Por su parte, Tepexco registró 3 casos, con 2 de ellos catalogados como no graves y uno como grave.
Finalmente, Xayacatlán de Bravo tuvo un caso grave. Los 26 casos restantes se distribuyen en otras regiones, de los cuales 19 son no graves y 27 son casos de riesgo.
Investigadores de la BUAP desarrollan vacuna contra el dengue
En enero de este año, la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) dio a conocer que investigadores de la institución, trabajan en una vacuna contra el dengue.
En entrevista con CENTRAL, la doctora Claudia Mendoza Barrera, de la Facultad de Ciencias Físico Matemáticas, explicó que se trata de una vacuna de amplio espectro.
Detalló que es una propuesta para utilizar nano acarreadores biopolímeros, con una de las proteínas que funciona como principal inmunógeno del virus.
La académica detalló que la etapa de esta investigación pasó los estudios celulares para poder administrarse y probarse en especies pequeñas como ratones.
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