Catalogar el acceso a la luz como un derecho, dar autonomía a la Comisión Federal de Electricidad (CFE), los riesgos de la cancelación de contratos y producir energía contaminante al limitar la participación de empresas privadas, son los argumentos a favor y en contra que han expuesto los diputados federales de Puebla respecto a la Reforma Eléctrica, en los días previos a su aprobación.
El pasado lunes, la Junta de Coordinación Política (Jucopo) aplazó la votación del dictamen, al no reunir los votos necesarios para lograr el respaldo de las dos terceras partes del Pleno, por lo que ahora sesionarán el próximo domingo, a las 10:00 horas.
La iniciativa impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, que busca modificar los artículos 4, 25, 27 y 28 de la Constitución federal, ha generado distintos tipos de posicionamientos, tanto a favor como en contra.
En el marco de la votación, diputados federales por Puebla del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), del Partido del Trabajo (PT) y de Acción Nacional (PAN), han expuesto, en entrevista a CENTRAL y en distintas ruedas de prensa, los cambios benéficos y contraproducentes de la Reforma Eléctrica.
Reducir participación de privados, los argumentos de Morena
El diputado de Morena, Alejandro Carvajal Hidalgo, indicó que el servicio de luz será elevado a derecho constitucional, lo cual, servirá para que ninguna persona pueda quedarse sin electricidad por falta de pago.
También, que se eliminará el “esquema de auto abasto”, que fue usado para que sociedades se suministraran a sí mismos electricidad, generando “un quebranto” a la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Carvajal Hidalgo subrayó que la Reforma Eléctrica pretende eliminar la deuda de luz que tienen 2 mil 46 ayuntamientos en todo el país, que asciende a 13 mil millones de pesos. Precisó que este recurso podría ser utilizado para infraestructura.
Por su parte, la representante del PT, Nelly Maceda Carrera, destacó que la propuesta del Ejecutivo “beneficiará” a 46 millones de familias; 3.5 millones de pequeñas empresas, así como a 5 millones de campesinos y mil 300 sistemas operadores de agua, pues la meta es reducir el costo de la electricidad y proteger los recursos energéticos del país.
“Los objetivos principales son garantizar a las familias precios justos por el servicio de uso doméstico de la electricidad para impulsar el desarrollo de México y proteger los bienes de la Nación, como el litio, que es considerado un mineral estratégico para el desarrollo”.
La diputada de Morena, Julieta Vences Valencia, destacó que la reforma energética de Enrique Peña Nieto no trajo ningún beneficio a la CFE, por lo que ahora, con la nueva propuesta, se pretende evitar la “privatización del sector”, al dejar que CFE tenga el control del 56% del mercado.
Además, que la Comisión podrá dejar de subsidiar a empresas privadas con las que se mantienen convenios por un monto total de 215.4 mil millones de pesos por el despacho de energía, además de “ahorrar” 222.9 mil millones en la compra de electricidad.
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CFE, sin capacidad para garantizar abasto y energías limpias
El argumento de que el Ejecutivo ahorraría recursos al cancelar convenios ha sido rechazado por el diputado del PAN, Mario Riestra Piña, quien acusó que el gobierno federal tendría que desembolsar 100 mil millones de dólares por el pago de indemnizaciones.
Dijo que la producción de luz por parte de la CFE tendría un costo cinco veces superior al de las empresas privadas, situación que generaría un aumento en los precios.
A su vez, Carolina Beauregard Martínez la calificó como una reforma “retroactiva”, pues subrayó que se da un paso atrás en la inversión privada, lo cual, generaría desempleo dentro del sector energético. Agregó que las ensambladoras de la industria privada mantienen porcentaje de energías limpias, que la CFE no podría cumplir.
Sobre este punto, la diputada Ana Teresa Aranda ha explicado que la producción por parte de la CFE desatará “daños a la salud”, debido a que operan con plantas de energía basadas en la quema de combustorio y carbono.
Subrayó que, con la reforma eléctrica, la Comisión no se dará abasto al absorber la producción energética, mientras que estarán obligados a dar mantenimiento y construir nuevas plantas, para lo cual, se requieren “recursos que no tiene el país”.
La oposición se sigue manteniendo su voto en contra del dictamen para el próximo domingo, toda vez que la 4T requiere de 55 votos para lograr la mayoría calificada.
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