En el municipio de Izúcar de Matamoros, detuvieron a Gerardo, alias “El Chaka”, miembro de un grupo de personas que amenazó de muerte, secuestró y despojó de sus armas a elementos ministeriales de la Fiscalía General del Estado (FGE) de Puebla.
El sujeto está relacionado con diversos ilícitos en la zona. Además, las autoridades realizan la búsqueda de otros involucrados en el caso.
De acuerdo a los hechos, el 12 de mayo de 2023, cinco agentes de la Fiscalía Especializada en Investigación de Delitos de Violencia de Género contra las Mujeres, hacían indagatorias por la desaparición de una persona.
Por ello, acudieron a la carretera Izúcar de Matamoros-Cuautla, a la altura del Barrio Santa Cruz Tecoxco a bordo de una patrulla.
Al estacionarse frente al bar “Shangoo”, un grupo de personas llegó en una camioneta y amagó a los agentes investigadores con un arma de fuego.
Posteriormente, los sujetos golpearon y secuestraron a los agentes, subiéndolos a una camioneta, pese a que se identificaron como personal de la Fiscalía de Puebla.
Los delincuentes también les robaron sus pertenencias y cuatro armas de cargo. Luego, los bajaron del vehículo, los hincaron y les dijeron que los matarían. En ese momento, al escuchar que se acercaban patrullas para auxiliar a los agentes, los agresores huyeron
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Fiscalía de Puebla logró imputación contra “El Chaka”
La Fiscalía de Puebla inició las investigaciones e identificó a Gerardo junto con otras personas como responsables del secuestro de los agentes ministeriales en Izúcar y se logró detenerlo. Esto tras solicitar una orden de aprehensión que libraron el 15 de mayo de 2023.
El 9 de septiembre de 2024, agentes investigadores ejecutaron el mandamiento judicial contra Gerardo. Al día siguiente, la Fiscalía formuló imputación por homicidio calificado en grado de tentativa, privación ilegal de la libertad y robo agravado.
La defensa solicitó la ampliación del término constitucional, y la autoridad judicial le impuso la medida cautelar de prisión preventiva oficiosa. Por ello, el próximo 15 de septiembre se resolverá la situación jurídica del imputado.
Por estos hechos, la Fiscalía de Puebla cateó varios bares, un taller mecánico y dos domicilios particulares. Durante las diligencias, se aseguraron dos pistolas calibre 9 milímetros, robadas a los agentes investigadores junto con una sirena electrónica.
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