Me cuentan que mi adorada Roxy (Roxana Luna), ya anda pensando en ser candidata del PRD a la gubernatura.
Según algunos amigos, le cayó como anillo al dedo la supuesta división o fragmentación de la coalición Va por México, o el hecho de que el PAN y el PRD hayan metido a la congeladora al PRI.
Y aunque faltan dos largos años para las elecciones del 2024 y muchas cosas por ver, tal y como dice la Biblia. Ella ya piensa en la fragmentación total de la coalición, pues le conviene porque quiere volver a ser candidata a la gubernatura.
Eso es lo que se rumora por el pequeñito pasillo del PRD allá en la 13 Oriente. Según los escasos perredistas, mi Roxy Luna ya anda bien apuntada para ser candidata nuevamente al gobierno por parte del PRD.
Lo malo es que, en aquel lejano 5 de junio de 2016, mi adorada Rox solo obtuvo el 2.8% de la votación, cuando el Sol Azteca tenía aún adeptos, ahorita ya es casi imposible que logre esa votación.
Pero mi adorada amiga es muy lista y no da paso sin huarache. Así que si se hace la alianza PAN- PRI- PRD, buscará ser candidata a presidenta municipal de San Pedro Cholula, aunque ahí con todo y que es su bastión, en esa misma elección obtuvo 300 votos.
Pero bueno, ya con el apoyo del PRI y del PAN seguramente Roxy Luna hará un buen papel, o la veremos en las boletas del 2024, ya sea para la alcaldía, una diputación local o federal. Aunque hay muchos perredistas que están enojados con ella, pues dicen que los ha relegado.
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Para mí que ese distanciamiento entre el alcalde de Puebla, Eduardo Rivera y el gobernador Miguel Barboza es mero teatro.
Ambos se conocen, se quieren y se respetan. Afuera de la esfera política se llevan re bien y desde hace muchos años.
Y aunque el Góber dijo que no asistiría a ningún evento público con Lalo porque “ya anda en campaña”, dijo que sí asistirá a dar el Grito de Independencia en el Palacio Municipal.
Si de verdad hubiera una división, Barbosa de plano no iría al Palacio para dar el festejo del 15 de septiembre. Recordemos que con Claudia Rivera de plano no se paró por allá. Hasta mandó a hacer su balcón para Casa Aguayo.
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