En Puebla llueven detenciones.

En menos de una semana, la Fiscalía General de Puebla ha ejecutado tres órdenes de aprehensión en contra del exauditor del estado y dos exfuncionarios estatales.

Los detenidos están cayendo como moscas, uno tras otro. No puedo dormir pensando en si ya detuvieron a alguien más y la duda me mata por saber quién será el siguiente.

Tras las detenciones, ya son más de una decena de políticos y exfuncionarios quienes se visualizan tras las rejas y que han decidido esconderse.

El viernes detuvieron a Francisco Romero Serrano, el primero de marzo a Guillermo Aréchiga y ayer a Juan Carlos Fernández Jasso.

¿Quién sigue?

Difícil saberlo, pero ya todos estamos haciendo nuestras quinielas.

El gobernador, Miguel Barbosa dio el año pasado algunas pistas sobre quiénes habían cometido desfalcos en la época morenovallista y eran investigados.

Entre ellos están: Jorge Aguilar Chedraui, exsecretario de Salud; Jorge Benito Cruz, por el Capcee; Xavier Albizuri, por Infraestructura; Rodrigo Riestra y el famoso caso de los mototractores y la “limpieza” de Valsequillo, por mencionar a algunos.

También anda por ahí un exdirector de Comunicación Social, que hasta hace una semana todavía mandaba sus cápsulas informativas a sus colegas y amigos, y hoy está desaparecido.

De los funcionarios de esta administración, Barbosa no se ha tentado el corazón para correr e investigar a quienes formaron parte de su propio gabinete.

Entre ellos a Vanessa Barahona, de Turismo; Abelardo Cuellar, de la Secretaría del Trabajo; y hoy se audita a la secretaría de Igualdad Sustantiva, por un posible desfalco que tal vez no le toca a su extitular Mónica Díaz de Rivera, pero sí a sus subalternos.

No estoy diciendo que a ellos los vayan a detener, solo reviso quiénes podrían estar escondidos y hasta posiblemente ya fuera del país.

Mientras ¡hagan sus apuestas!

Los parquímetros y su costo social

Algunos han llamado la atención sobre cuál será el costo social que deberá asumir el alcalde de Puebla, Eduardo Rivera.

Sin embargo, el Ayuntamiento de Puebla tiene bien medida esta jugada para que no repercuta en la calificación al gobierno del panista.

Para fijar el precio de estos estacionamientos virtuales, la comuna hizo una encuesta sobre cuánto estarían dispuestos a pagar los poblanos.

El resultado arrojó que 8 pesos sería un precio justo, por eso tomaron la decisión de que Puebla tuviera los parquímetros más baratos del país, para que su costo estuviera muy por debajo de las expectativas de los poblanos.

Aquí serán gratis la primera hora, la segunda y tercera costarán 5 pesos y la cuarta 10 pesos. Así ¡todos felices y contentos!