En toda organización se cuenta con una estructura y sistema de trabajo que ayuda a tomar decisiones, no solo por la autoridad formalizada en un organigrama, sino también por la forma en que se transmiten las ordenes o instrucciones hacia el personal de la empresa (por escrito, verbalmente, gestos e incluso ademanes y señales – ¿le han “tronado” los dedos últimamente?). Aunque esto parece mas que obvio, al momento de transferir autoridad debe considerarse a que tipo personas se les esta otorgando dicha autoridad y responsabilidad, pues no solo se trata de hombres y mujeres con preparación académica, sino también de confirmar si cuentan con el perfil adecuado para tener gente a su cargo, rasgo que muchas empresas omiten frecuentemente.

En el mercado existen muchos libros que hablan sobre temas de liderazgo y motivación, lástima que los que debieran leerlos los ignoran y otros los han leído, pero seguramente ¡de noche y cansados!… pues es muy lamentable que un supervisor o gerente se jacte de haber leído libros o haber tomado cursos de “empowerment” /delegación de autoridad, cuando en la practica parece que nunca lo hicieron.

La forma en que una persona da ordenes o instrucciones, es de alto impacto en el personal, independientemente de los recursos de la organización, ya que las palabras, gestos y actitudes hacia los demás, pueden ser el detonante del crecimiento organizacional o la debacle de la empresa. Aun en la guerra las palabras marcan la diferencia en el resultado de la batalla Elizabeth The Golden Age – Discurso de Batalla (Subtitulado) – YouTube, aunque claro, en este espacio se está analizando la motivación laboral, no la bélica.

Si los dueños o altos directivos de una empresa pudieran percibir cuanto entusiasmo de su personal es “quemado” todos los días, debido al tipo de personas a las que se les dio autoridad, los despedirían inmediatamente, pues saben que la motivación y las ganancias van de la mano; aunque claro en algunas empresas los márgenes de ganancia son tan grandes, que “esos pequeños detalles” no son de consideración, hasta que vienen las crisis, solo hasta entonces,  ahora si enfocan en cuidar cada centavo de “su creación”.

Las personas que inician en una organización, con el tiempo buscan aportar ideas para hacer mejor su trabajo o en su caso esperan un trato profesional por parte de sus superiores para hacer su mejor esfuerzo, PERO, se “topan con pared” cuando lo único que reciben son gritos, insultos y hasta amenazas, llegando a este punto, la motivación ha sido fulminada como un rayo, entonces la persona no volverá hacer ninguna recomendación y seguramente empezara a buscar otro empleo; habrá casos donde el empleado intentara boicotear su trabajo o vengarse del patrón ¿le suena conocido?

El lenguaje (verbal y no verbal) y la actitud de las cabezas de la organización deben cuidar sus formas y estilo, al momento de interactuar con sus colegas o empleados, pues aún la comunicación por correo electrónico o WhatsApp mostrara de que están hechos los jefes de la empresa, en ocasiones los mensajes electrónicos dicen mas que las palabras mismas, considere además que se pueden agregar símbolos (emojis) o figuras que describirán su estado de ánimo, Emoji la pelicula parte 5 – YouTube .

Para motivar, un gerente puede pronunciar palabras elocuentes y bien intencionadas, sin embargo, sus gestos, ademanes y actitud, determinaran si fueron palabras sinceras o “aventadas” por compromiso, al igual que muchos políticos, en donde sus discursos son trillados y carentes de sustancia, (a veces ni ellos mismos se las creen). En el gobierno y en las empresas, las palabras dichas por el líder deben ir acompañadas de hechos, pues solo así, podrán tomarse con seriedad y credibilidad. Cuando un empleado ve la coherencia de su jefe inmediato (entre sus palabras y los hechos), entonces la motivación se incrementará y por ende la eficiencia de la empresa.

El Diálogo de hoy:  – en la oficina del jefe-

Gerente – Bueno, hoy es su primer día formal en la empresa. Así que debe saber las reglas de mi área, soy muy

demandante y exigente, a veces seré “agresivo” o gruñón, incluso grito fuerte muchas veces y dijo algunas malas palabras, pero lo importante es que no lo debe tomar personal, así soy yo, un poco caprichoso y especial.

Nuevo empleada- Gracias por su describirme su “estilo” de trabajo, pero entonces hay un requisito que no cumplo.

Gerente – Pero si usted cumplió con todos los requisitos para el puesto, ¿cuál no cumple?

Nuevo empleada- Uno que se no publicó: sin autoestima y dignidad.