Candy Escobedo Gómez, la regidora de Industria, Fomento Económico y Turismo de Zacatlán rentaba el local donde ocurrió la balacera la madrugada del 4 de noviembre en Jicolapa y donde murieron dos estudiantes del Tecnológico.
El cliente que renta a Candy Escobedo el local para un depósito de cerveza es un empresario originario de Libres a quien se le liga con el narcomenudista Omar N. alias “El Patrón”.
El empresario de Libres se alió con Ricardo N., el carnicero que fue ejecutado el 14 de noviembre en la colonia El Calvario. Juntos dejaron de comprarle la droga a “El Patrón” y se declararon independientes.
Según información a la que tuvo acceso PÁGINA NEGRA y que es parte de las investigaciones que han llevado a la Fiscalía General del Estado a la realización de varios cateos, el empresario de Libres y el carnicero comenzaron a comercializar cristal proveniente de Tepito.
La venta de la droga se realizaba de manera descarada en el local, propiedad de la regidora Candy Escobedo. Y a pesar de que existían denuncias sobre el comercio de cristal, el Ayuntamiento de Zacatlán jamás hizo caso.
La estructura del “Patrón” en Zacatlán
Según información de inteligencia estatal a la que tuvo acceso PÁGINA NEGRA, “El Patrón” llegó a Zacatlán en el año 2015.
Como PÁGINA NEGRA informó, “El Patrón” es originario de Huauchinango y actualmente se resguarda en Apizaco, Tlaxcala.
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Entre su estructura nombró a un hombre conocido como “El Koala” como su operador en Zacatlán. A quien mantuvo con varios puntos con la venta de droga, entre ellos el bar ubicado en el local propiedad de la regidora.
Sin embargo el representante de “El Patrón” abandonó por meses sus espacios. Y fue cuando el empresario del bar decidió hacerse independiente en la venta de droga. Con apoyo de Ricardo N., el carnicero ejecutado recientemente quien logró traerlo desde Tepito.
Es importante decir que uno de los espacios cateados en El Moral, Zacatlán, es propiedad de “El Koala”.
Cuando “El Koala” y “El Patrón” supieron que en el local de la regidora Candy Escobedo se vendían drogas directamente comercializadas por el propietario del bar. Y planearon el ataque al lugar y la ejecución de Ricardo N., “El Carnicero”.
El bar estaba lleno de estudiantes cuando ocurrió la balacera
El bar de Jicolapa en Zacatlán, ubicado en el local de la regidora, era frecuentado por miembros de la comunidad estudiantil del Tecnológico.
El ataque ocurrió cerca de la 1:00 de la mañana del viernes 4 de noviembre. Cuando vecinos de la avenida José Luis Martínez Vázquez, en esta junta auxiliar, reportaron varios disparos en el establecimiento.
De inmediato, los cuerpos de emergencia se trasladaron a la zona y confirmaron que en el sitio había 11 personas heridas, 9 de ellas las enviaron al Hospital General de Zacatlán. Dos murieron en el lugar.
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