Si usted se encuentra a Gerardo Islas por la calle, mejor guarde su cartera.
Y no, no estoy diciéndole ratero.
Más bien, Gerardo Islas, el buen Gerry, anda desesperado por financiamiento.
Le urgen patrocinadores para su partido, Fuerza por México, del cual es presidente nacional.
Pero parece que simplemente no tiene nada, más que de la fama que le quedó del Morenovallismo. Eso, y un aspirante a presidente municipal de Puebla que, tampoco, tiene dinero para invertir en su campaña.
Exacto, hablamos del buen Rafael Moreno Valle Buitrón, quien se describe a sí mismo en sus redes sociales como “Político, Empresario, Tenor, Altruista y Filántropo. Comprometido con el empoderamiento de la ciudadanía, por la vía plural, democrática, incluyente y participativa”.
Moreno Valle Buitrón, es mejor conocido en su primer círculo familiar como Rafy, por aquello de que en su familia había que distinguir entre él y su prominente padre, Rafael Moreno Valle Sánchez, uno de los hombres que, hasta sus últimos días, fue uno de los más poderosos de Puebla.
Recientemente un connotado político fue el objetivo de Gerry y de Rafy.
No vamos a dar nombres para evitar que exhibir a este político que casi cayó en las garras de Fuerza por México.
A este connotado personaje le pasaron la charola y le pidieron 5 millones de pesos.
Nomás.
Y eso para cumplir con los primeros pasos del partido de reciente creación y que jamás ha estado en alguna boleta.
Los 5 millones de pesos eran prácticamente una ganga, porque el micro partido iba a ser suyo en Puebla.
¡Qué ofertón!
Pero, algo ocurrió que el personaje entró en razón.
¿Por qué? Porque investigó cuál era la inversión que tanto Gerry y Rafy estaban haciendo individualmente a la próxima campaña.
La respuesta de su investigación fue: C-E-R-O.
El partido Fuerza por México nació muerto, por lo menos en Puebla.
Nació desvalido y nació desprotegido. Primero porque Gerry no va a poner un peso suyo para perderlo en una elección que suena demasiado complicada.
Y segundo porque Rafy no tiene un peso más que una mesada mensual a la que tiene acceso por la generosidad de su familia.
Y si a esta falta de capital le sumamos que hay pocos interesados en ser candidatos de Fuerza por México, y que tiene ya una sombra oscura proveniente del Senador de Morena, Alejandro Armenta Mier, pues tenemos una receta para el desastre.
A Armenta ya lo escuchamos hasta en grabaciones que se hicieron públicas recientemente, empuja para que Fuerza por México sea uno de sus cotos de poder en las eleciones del 2021.
Por eso cerró a Rafy como el líder en el estado y lo proyecta como su candidato en la capital.
El plan B de Armenta, en caso de que no cuaje con Morena su candidatura del 2024, es Fuerza por México, pero, primero tendrá que mantener su registro en estas primeras elecciones.
Y eso si es que Rafy y Gerry amarran por fin a alguno de los patrocinadores.
Así que incautos y personas que tienen el sí muy fácil, aguas...
Mejor guarden sus carteras.
