El año que recientemente concluyó fue uno de los más complicados para la planta de Volkswagen instalada en Puebla. La firma alemana cerró con una disminución de 5.6% en sus niveles de producción y con ello ensambló cerca de 26 mil automóviles menos en relación al 2017.
El 2018 fue negro para la armadora germana. Su producción se fue a pique y ello generó una serie de decisiones complicadas que incluyeron despedir a su plantilla completa de trabajadores eventuales, así como ofrecer retiros voluntarios a los sindicalizados para evitar su salida definitiva.
De acuerdo con el reporte de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), en conjunto con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), Volkswagen fabricó en 2018, casi 26 mil vehículos menos en relación con los ensamblados durante el 2017.
El año pasado, Volkswagen fabricó 435 mil 373 automóviles, cifra que se encuentra por debajo de los 461 mil 248 unidades
La caída de Volkswagen
Para la empresa automotriz ubicada en Cuatlancingo, las malas noticias no pararon a la largo del año pasado y una de las complicadas fue cuando desde su matriz en Europa, tomaron la decisión de concentrar toda la producción del automóvil Golf en Alemania. Por ello, el modelo dejó de fabricarse en Puebla, pese a que llevaba 4 años siendo ensamblado en sus instalaciones.
Tras este hecho, continuaron las bajas en la planta automotriz, pues a finales de agosto registró una caída de producción cercana al 11 por ciento, principalmente en el segmento Jetta. Esto provocó que se tomara la decisión de despedir a 450 trabajadores eventuales, quienes salieron de la empresa por etapas, para concluir su salida el pasado 9 de septiembre.
Además, el Sindicato advirtió que los empleados que recientemente habían obtenido su contrato de base también estaban en riesgo de ser despedidos.
Otra baja para Volkswagen se dio a principios de septiembre, pues los directivos de la empresa anunciaron que a partir de este año, dejaría de producir el Beetle, uno de los modelos más significativos que se fabricaban en su planta de Cuatlancingo. Esta decisión se tomó pese a que el modelo llevaba 7 años ensamblándose en el estado.
VER: En medio de su crisis de producción, Volkswagen anuncia que dejará de fabricar el Beetle
Después de estos hechos y debido a la baja producción que la empresa presentó durante todo el 2018, en septiembre la planta anunció un paro técnico de 7 días en la línea de fabricación del Golf, lo que afectó a 580 de sus trabajadores. El Sindicato aclaró que esta suspensión de labores sería a partir de 14 para concluir el 20 de septiembre.
VER: Volkswagen en caída libre: se van a paro técnico 580 trabajadores de la línea del Golf
Asimismo, del 8 al 21 de octubre, la planta armadora presentó otro paro técnico ante la caída de producción. Para evitar el despido de trabajadores sindicalizados, las líneas de producción del Jetta dejaron de fabricar el modelo durante dos semanas.
Debido a estas estas acciones, la planta de Cuatlancingo cerró el año con una baja del 5.6 por ciento, pues en 2018 fabricó 435 mil 373 automóviles. Mientras que el 2017 cerró con 461 mil 248. Lo que indica que el año pasado ensambló 25 mil 875 vehículos menos.
Por si esto fuera poco, Volkswagen también cerró el año con una caída del 17.5 por ciento en sus ventas, pues vendió 192 mil 926 vehículos durante todo el 2018, cifra que disminuyó en relación a los 233 mil 942 automóviles comercializados en el 2017.
VER: Volkswagen cierra el 2018 con una caída en ventas de casi 18%
Además, también se registró una baja en su exportación de automóviles. Durante todo el 2018 la planta armadora exportó 377 mil 437 vehículos, cifra que disminuyó 2.2 por ciento en comparación con los 386 mil 122 exportados durante el 2017.
