19 de Abril del 2024

El extraño retorno de los acosadores de Vialidad Estatal

Por Edmundo Velázquez / /
El extraño retorno de los acosadores de Vialidad Estatal
Foto: Especial

 

CuentaHastaDiez

En verdad, no hay que ser un erudito para notar el periodo histórico en el que vivimos.

Las mujeres en Puebla y México no solamente peligran todos los días al salir a la calle, al realizar su trabajo.

La violencia feminicida y machista está en todos lados. Hasta en las dependencias públicas.

Así pasó en el área de Vialidad Estatal años atrás.

Dos altos mandos de Vialidad Estatal fueron removidos en el periodo del gobernador Tony Gali Fayad por las fuertes acusaciones en su contra de parte de subalternas quienes los señalaron por acoso sexual.

Hablamos de Cástulo Olivares Huerta y Enrique Raúl Campos Montes de Oca.

Ambos funcionarios tuvieron que ser separados luego que uniformadas que se encontraban bajo su cargo fueron acosadas sexualmente por ellos.

Los dos funcionarios de Validad no volvieron a ser vistos en buenos puestos y merodearon durante el interinato de Guillermo Pacheco Pulido.

Pero, ahora con el nuevo gobierno de Luis Miguel Barbosa, están usando a su favor el total desconocimiento del secretario de Seguridad Pública, Miguel Idelfonso Amezaga Ramírez para volver a colarse.

Y ya los vieron a ambos muy campantes en el Centro de Control, Cómputo, Comando y Coordinación (C5).

¿A qué volvieron? ¿Van a regresar a perpetuar el acoso sexual a las funcionarias del área de Seguridad Pública?

De buena fuente sabemos la gente de la Policía Estatal de Caminos están hartos de ellos, así que en cuanto los vieron posar sus pesuñas por el C5 se corrió la voz de que los acosadores estaban de vuelta.

¿Sabrá su tétrica historia el secretario Amezaga?

¿Al gobernador Barbosa le convendrá que le estallen escándalos sobre acoso sexual en Seguridad Pública?

No creo. Y menos, la gente de la SSP espera que personajes como estos acosadores regresen.

Por parece que los acosadores volvieron ya.

Y no precisamente bailando el chachachá.

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