¡Madre sólo hay una! Pero si hay algo que todas tienen en común (por lo menos en México), son las épicas frases con las cuales nos han educado a lo largo de estos años y han quedado grabadas en nuestra memoria para siempre. ¡Ay, nuestras mamás!
Con las celebraciones del 10 de mayo, Día de las Madres, recordamos todas las maneras en las que nuestras “jefecitas” se preocupaban por nosotros y nos demostraron amor a su muy peculiar manera.
Ya sea para no pasar frío o para hacerte entender que no debes dejarte influenciar por nadie, las mamás usan su agudo sentido para llamarnos la atención con palabras que se han heredado de generación en generación.
Y nos guste o no, todo eso formó parte de nuestra infancia que sin duda se agradece ya de adulto. Tanto así que hasta las aplicamos en el día a día con nuestros amigos y seres queridos, aunque no tengamos peques en la casa.
Que no te sorprenda si en algún momento las usas con tus propios hijos e hijas. Aquí nuestro pequeño homenaje a las mujeres más chidas de este mundo en su día.
“¿En dónde estabas? Me tienes con el Jesús en la boca.”
“¿Qué hice para merecer esto?”
“¿Ya ves? Por andar pegado al celular.”
“A mí me duele más que a ti.”
“Dile a tu papá.”
“En la casa hay frijoles.”
“Esta casa no es hotel.”
“Llegando a la casa vas a ver.”
“Mi casa, mis reglas.”
“Mientras vivas en esta casa, se hace lo que yo digo.”
“O te aclimatas o te aclichingas.”
“Pásame el este…”
“Pero cuando me muera vas a sufrir.”
“Pero lo vas a pagar cuando tengas hijos.”
“Saliste igual de borracho que tu papá.”
“Si tus amigos se avientan de un puente, ¿tú también?”
“Te lo digo por tu bien.”
“Te voy a dar una razón para que llores.”
“Y si lo encuentro ¿qué te hago?”
“Yo a tu edad…”
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