En la Auditoría Superior del Estado (ASE) había una red de complicidades cuando el órgano de fiscalización estaba a cargo de Francisco Romero Serrano, acusó el gobernador de Puebla Miguel Barbosa Huerta, al advertir que todo se va a investigar.
En conferencia de prensa, dijo que la autoridad definirá si las cuentas públicas como Cuetzalan y 20 municipios priistas más están libres de observaciones, ante el involucramiento que hubo entre el ex auditor con políticos del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
Aseguró que existe información sobre quiénes eran los encargados de despacho que manejaba Romero Serrano y a qué municipios auditó.
Hay información de esa red de complicidades, información de quiénes eran los despachos que manejaba el auditor Superior del Estado, a qué municipios auditaron ellos, todo. Pero yo no voy a decir que tenga responsabilidad o no, será en todo caso la autoridad la que defina esto”.
Indicó que quien ejerce el poder obtiene toda la información y por ello, conoció que dentro de la ASE todos los trabajadores formaban parte de la red de complicidades y eran alcahuetes de Romero Serrano.
Acuérdense que a quien ejercer el poder le llega toda la información, ¿y qué es lo que había en la auditoría? Había una red de complicidades. Todos los que trabajaban en la auditoría, a excepción de la gente limpia, sí, pero muchos se volvieron los alcahuetes y cómplices del exauditor”.
CENTRAL publicó que el municipio de Cuetzalan, a cargo de Gerson Calixto Dattoli, no tuvo una sola observación a su cuenta pública 2019. La cual fue revisada por la ASE, cuando Romero Serrano estaba a cargo.
El caso de Calixto Dattoli resaltó porque fue señalado directamente por el periodista Fernando Maldonado en su columna Parabólica, de pagar un millón 600 mil pesos para que limpiarán su cuenta pública en la ASE.
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