El candidato a diputado federal por el Distrito 10 de Puebla, Humberto Aguilar Coronado, justificó el voto del Partido Acción Nacional (PAN) a favor de las terapias de conversión.
Durante una entrevista con medios de comunicación, expuso que los militantes del blanquiazul mantienen un profundo respeto por la comunidad LGBTTIQ+.
Sin embargo, dijo que la propuesta presentada en la Cámara de Diputados está mal planteada, al señalar que no son terapias de conversión.
Al mismo tiempo, Humberto Aguilar dijo que el voto del PAN en contra fue porque no se puede permitir que con la definición de terapias de conversión se criminalice. Tanto a los padres de familia, como a los terapeutas, psicólogos e incluso sacerdotes, quienes “atienden” a los jóvenes.
Nosotros manifestamos un profundo respeto por la comunidad, el tema es que está muy mal planteado desde el nombre, no son terapias de conversión, no podemos permitir que se criminalice”.
El diputado con licencia comentó que los menores de edad no cuentan con madurez para decidir dar un paso hacia la transexualidad. Y al mismo tiempo, aseguró que este punto de vista no minimiza las infancias, sus derechos y libertades.
Aguilar Coronado agregó que no tienen por qué criticar la posición de un grupo parlamentario, puesto que no deben existir unanimidades. Y al mismo tiempo, destacó que al final aprobaron la propuesta.
¿Qué son las terapias de conversión?
Las terapias de conversión a las que hizo referencia el panista Humberto Aguilar, son definidas por los expertos de la Organización de las Naciones Unidas como prácticas discriminatorias.
Además de crueles e inhumanas y degradantes que incluyen dolor físico o mental, equivalentes a diferentes formas de tortura, “según el grado de dolor”.
Este tipo de terapias tienen por objetivo cambiar la orientación sexual o identidad de genero de un individuo.
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Según los promotores de estas, las terapias “pueden transformar” a las personas homosexuales en heterosexuales.
Los métodos de las terapias de conversión se basan en la creencia de que las personas de orientación sexual e identidad de género diversa/diferente son de alguna manera inferiores moral”.
Sin embargo, estas pueden incluir abusos físicos, psicológicos y sexuales, pero también medicación forzada, electrocuciones, confinamientos, aislamiento e humillación.
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