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A golpe limpio y sin más distracciones comenzó “La Batalla por Puebla” de los candidatos a la gubernatura, quienes se colocaron los guantes y subieron al ring en busca de ser el próximo mandatario poblano.  

Con mensajes en las redes sociales, eventos multitudinarios, caminatas vecinales, los tres aspirantes se enfrentaron en el primero de 60 rounds de “La Batalla por Puebla”. 

La arena de Puebla está repleta, son al menos cinco millones de ciudadanos los que están en facultades de votar.  

Miles de ciudadanos revisarán las propuestas, verán miles de anuncios en redes, giros inesperados, entrevistas y descalificaciones que lanzarán los candidatos. 

En la esquina azul y con calzoncillos en combinado tricolor y amarillo, está Eduardo, “Gelatinas”, Rivera, el único panista con peso para enfrentar al favorito de las apuestas. Tiene un récord de dos triunfos y una derrota por la alcaldía de Puebla. 

En la esquina guinda, con 34 años de trayectoria y el peso del extinto marinismo a sus cuestas, de calzoncillos rojos, turquesa y rosa, Alejandro “Shinkansen” Armenta. 

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Y en la esquina naranja, con calzoncillos “fosfo fosfo”, con el peso de ser hijo del mejor gobernador de Puebla. Entrenado en las filas del PRI, el no tan nuevo retador, “el hijo de tigre pintito”, Fernando “El Junior” Morales.   

¿Quién ganó el primer round? 

En el primer día de “La Batalla por Puebla”, los candidatos a la gubernatura tuvieron un cierre muy parejo. Los jueces no pudieron definir a un ganador en este primer asalto.  

Aunque si se debe declarar a un perdedor en ese primer episodio de “La Batalla de Puebla”, este sería Fernando Morales. El representante de Movimiento Ciudadano subió al cuadrilátero sin “entrenador”, ni quién le soplara. 

Alejandro Armenta y Eduardo Rivera hicieron una entrada triunfal en su primer día de campaña, al acompañarse de sus candidatos presidenciales, Claudia Sheinbaum y Xóchitl Gálvez.  

Mientras que Fernando Morales saltó al ring en desigualdad de condiciones. Su entrenador prefirió asistir a “La Sultana del Norte”, en donde tiene mayores posibilidades de ganar su peleadora Mariana, “La Chabacana”, Rodríguez. 

Los tres candidatos a la gubernatura tuvieron como sus “seconds” a los candidatos a la presidencia municipal de Puebla, acompañándolos en su arranque de campaña. Sin embargo, estos se vieron opacados por la pelea estelar, pues sus participaciones fueron mínimas y sin robar reflectores. 

Mario Riestra quedó minimizado en el que también era su arranque de campaña. Pepe Chedraui no subió al templete con Claudia Sheinbaum, por aquello de la fiscalización. Y Rafael Cañedo, a quien en su defensa, al menos ya tiró sus primeros golpes. 

¿Quién dio los mejores golpes?

Armenta y Morales fueron los primeros en iniciar el ataque, al realizar eventos durante la madrugada de este sábado. Mucho apapacho por parte del morenista, quien se instaló en el Zócalo de Puebla. Mientras que el emecista empezó una caminata, en la cual casi se queda sin aire al recorrer seis calles del sur de Puebla. 

Por su parte, Eduardo Rivera sólo lanzó un cómodo mensaje en redes sociales. Esperó hasta las diez horas para iniciar a lanzar sus propuestas, ya con el respaldo de Xóchitl Gálvez. Finalmente el que más golpes “rectos” lanzó fue el panista, quien, desde la Plaza de la Victoria presumió 20 mil asistentes y dijo:  

Los que no cumplieron su palabra tienen nombre y apellido, se llaman Morena, se llama Alejandro Armenta. Él exactamente como senador fue quien votó en contra del seguro popular y votó a favor de desaparecer los fondos para seguridad pública de los municipios y las instancias infantiles. ¿Con qué cara se atreve hoy a ofrecer la continuidad? Por eso este mal gobierno, aquí anunciamos que ya se va, se va este gobierno”.

Mientras que “Shinkansen” Armenta no se quedó atrás y dio su contragolpe con un “jab” bien colocado: 

Ese que hoy les pide el voto fue el que endeudó a Puebla. Y ese candidato, cuando fue presidente también abandonó a las juntas auxiliares y privatizó el agua”.

En tanto, Fernando Morales buscó la atención del público, al mandar a la chingada a Agua de Puebla y prometer penas de 50 años a asaltantes y ladrones. 

Los contendientes espejearon sus movimientos, fueron cautelosos, pero a la vez se envalentonaron frente a sus entrenadores. No obstante, debieron reservarse lo mejor para los capítulos finales. 

Fallas y errores tuvieron los tres candidatos a la gubernatura en “La Batalla por Puebla”

El staff de Armenta lo colocó en un predicamento, al destapar el templete de su propaganda por minutos antes de las 12 horas. Lo que se puede atribuir como un acto anticipado de campaña. Sin embargo, el Instituto Electoral del Estado (IEE) de Puebla hizo mutis. 

Mientras que, en su primer evento, la logística le falló al panista, pues por minutos se impidió el acceso a medios de comunicación invitados. A pesar de viajar en la van puesta por el equipo de Eduardo Rivera. 

Fernando Morales no se quedó con las ganas de “cargársela”. Pues se colgó de la figura de Luis Donaldo Colosio para arrancar su campaña diciendo que era un emblema de Movimiento Ciudadano. 

Y así transcurrió el primer round de los candidatos a la gubernatura; las tarjetas están de más, pues será por votación del público que se definirá al ganador de la “Batalla por Puebla”. 

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