El exdirigente en Puebla de la Sección 51 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Cirilo Salas Hernández fue uno de los invitados poblanos a la boda de la exlideresa Elba Esther Gordillo, a quien juró lealtad.
El también ex diputado local se tomó una fotografía con Gordillo durante la fiesta, celebrada el pasado sábado en el Jardín Etnobotánico, ubicado al interior del exconvento de Santo Domingo en la capital del estado oaxaqueño, donde primero protestaron maestros pertenecientes a la Sección 22 de la CNTE, quienes vandalizaron el lugar.
A la boda de Elba Esther también acudió el marinista Ramón Fernández Solana, es dirigente del Partido Redes Sociales Progresistas (RSP ) en Puebla, cuyo presidente es el yerno de Elba Esther, Fernando González Sánchez.
Cirilo Salas se ha declarado abiertamente como un seguidor fiel de Elba Esther. En entrevista a Intolerancia, consignó el 1 de enero pasado que está “agradecido con ella de por vida”.
“Como mujer, como ser humano, como política ha jugado el papel histórico que le corresponde, pero sobre todo se tiene que reconocer que, durante su tiempo, los trabajadores de la educación estaban en mejores condiciones económicas y de prestaciones”.
Cirilo Salas: una carrera en picada
La trayectoria de Cirilo Salas ha caído en los últimos años, pasando de los principales reflectores a la oscuridad política. Entre 2008 y 2012, ejerció como Secretario General de la Sección 51 de la SNTE en Puebla.
Posteriormente, en 2014, ingresó al Congreso local como diputado, bajo el cobijo de Nueva Alianza. En las pasadas elecciones, intentó repetir el cargo, aunque como representante de RSP.
Sin embargo, tras perder en la contienda, regresó a su oficio como docente. No obstante, en enero del presente año, la Secretaría de Educación Pública (SEP) lo cesó de su cargo a través de un procedimiento administrativo, ante lo cual presentó una demanda laboral.
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