El papá de Kenia y Zoe, las hermanitas que murieron después de ingerir veneno, se fugó después del hallazgo en la colonia Jardines de Castillotla.
Fuentes dentro de la Policía Ministerial de Puebla informaron a PÁGINA NEGRA, que el padre de las menores de 2 años y 11 meses de edad, quien se encontraba como responsable de ellas, no ha sido ubicado.
Hoy se informó que la Fiscalía General del Estado plantea que ambas niñas tomaron algún tipo de veneno para roedores o animales rastreros y que el caso podría tratarse de un homicidio culposo ya que el responsable de su cuidado fue negligente, en este caso su papá.
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Los cuerpos de Kenia y Zoe se encontraron dentro de su domicilio en la colonia Jardines de Castillotla, en Puebla. Y hasta el momento la Fiscalía de Puebla ha mantenido el sigilo sobre el caso.
Policía Ministerial a marchas forzadas por el caso
El fiscal Gilberto Higuera Bernal ha exigido a los agentes de la Policía Ministerial y del Ministerio Público, que están asignados a la investigación, que se esclarezca el caso.
Inicialmente se informó que ambas niñas no presentaron ningún tipo de marca, lesión o herida que sugiriera que sufrieran algún tipo de abuso físico. Esta versión fortalece la línea de investigación del envenenamiento o la intoxicación.
Por un asunto de protocolo, el caso lo investiga el área especializada en Feminicidio y delitos cometidos contra la mujer.
Esto no quiere decir que las pequeñas sean víctimas de feminicidio, si no que por el tipo de caso se presentó a esta área especializada.
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