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Yanelli Velasco se manifestó en la Fiscalía General del Estado de Puebla (FGE) para recordarles a las autoridades que después de 6 años de ser abusada sexualmente, sus agresores están libres.

Mi nombre es Yanelli Velasco, hoy antes de irme a trabajar, le vine a recordar a la Fiscalía que son 6 años sin justicia, 6 años donde la violencia ha atravesado mi vida de distintas formas. Acceder a la justicia literalmente me costó un ojo de la cara, me costó mi tranquilidad, me costó mi seguridad, la vida de mi hija también corrió peligro”, dijo Yanelli.

6 años sin justicia

Yanelli lleva 6 años sin conseguir justicia. Ayer se presentó en la Fiscalía para recordar que en el 2016 la abusaron sexualmente dos hombres dentro de un taxi. Sentenciaron a uno a 10 años de prisión y por esto, Yanelli comenzó a recibir amenazas.

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En 2017 las amenazas se cumplieron, nuevamente abusaron sexualmente de ella. En esta ocasión los hechos ocurrieron frente a su hija de 2 años. Además, le marcaron el cuerpo con la palabra “PUTA”, la golpearon causándole la pérdida de la vista del ojo izquierdo y parte de su audición. Por si fuera poco, también agredieron a su hija y le tomaron fotografías.

Hace 6 años después de hacer mi denuncia, yo confié en la Fiscalía y en los Ministerios Públicos, un año después de mi primera denuncia de 2016, se metieron a mi casa otra vez, me violaron delante de mi hija y a consecuencia de esa agresión me quedé ciega de este ojo y perdí mi oído izquierdo, me marcaron la palabra puta en mi pecho”, contó la mujer.

Yanelli Velasco acudió a las afueras de la Fiscalía para alzar la voz y recordarles a todos que sus violadores siguen libres. Aseguró que ya no tiene miedo y seguirá exigiendo justicia.

Ya no soy esa mujer que hace 6 años tenía miedo y que no conocía absolutamente nada de los trámites que se tienen que hacer en esta dependencia […] Parece que vengo a pedir favores, es parte de mis derechos acceder a la justicia y eso todavía no ha sucedido”, exclamó Yanelli a las personas que se encontraban con ella

A Yanelli Velasco la violaron dos veces en Puebla

Como PÁGINA NEGRA informó, la noche del 8 de junio de 2016 en Huauchinango, Puebla, Yanelli salió de su trabajo para dirigirse a su casa. Para llegar más rápido decidió tomar un taxi colectivo, en el que únicamente viajaba el chofer. Dos cuadras después, abordaron la unidad otros dos hombres; sin embargo, no eran pasajeros, sino delincuentes.

Los sujetos asaltaron al chofer y a Yanelli también le robaron y la violaron.

Un mes después, Yanelli Velasco vio cómo una patrulla trasladaba a dos hombres detenidos y reconoció a uno de los dos sujetos. Era uno de los hombres que abusó sexualmente de ella, se llamaba Erick.

La mujer conocía el nombre de su atcante porque mientras la violaba, su complice le decía: “¡Ya Erick, me toca!”. Así que siguió a la patrulla hasta la Comisaría Municipal.

Le marcaron el cuerpo con una navaja escribiéndole “PUTA”

Después de denunciar a Erick, Yanelli comenzó a recibir amenazas por parte de la familia de él. En octubre de 2017, dos hombres aprovecharon que Yanelli se encontraba sola en su casa con su hija para entrar, la azotaron contra la pared, la pisaron y le escupieron.

Mientras ella gritaba, a su hija de tan solo dos años le pegaron, la jalaron del cabello y la metieron a un cuarto para tomarle fotografías.

A mí no me gustan las escuinclas pero conocemos a alguien que sí”, dijo uno de los hombres.

Para que no le hicieran daño a su hija, Yanelli dejó de gritar. Después la violaron frente a su hija. Antes de que los sujetos se fueran, con la punta de una navaja le escribieron en el pecho la palabra “PUTA”.

Yanelli no podía respirar, su nariz estaba llena de sangre. Sus agresores le metieron su cabello en la boca; después se retiraron y ella perdió el conocimiento. Dos horas después, su madre la encontró tirada dentro de su casa.

Cuando la trasladaron a un hospital, los médicos le dijeron que tenía fracturada la nariz y un esguince. Su mandíbula estaba lastimada, presentaba derrame en el ojo y los oídos los tenía inflamados.

La Fiscalía cerró el caso y no tienen registró de la segunda violación

En julio de 2018, Erick fue sentenciado a 10 años de prisión por el delito de violación. Para las autoridades este caso quedó cerrado con la sentencia condenatoria, pero olvidaron que participó otro hombre.

Pero eso no es lo peor, pues las autoridades de la FGE “perdieron” el expediente de la segunda violación y no se realizó ninguna investigación y los responsables siguen prófugos.

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