Un día eres amada u amado y al otro día el más o la más odiada.
Un día te sacan de tu oficina hasta con policía y te amenazan con hacerte las peores cosas que se le podrían hacer a una persona.
Y al otro regresas como los grandes. Por la puerta principal, mientras que la persona que ordenó tu persecución sale por la puerta de atrás.
Bien dicen que los carniceros de ayer son las reses de hoy. La vida da tantas vueltas.
El verdugo ahora está en la guillotina.
Y ahora todos somos Pedro Gómez porque es el monumento cuyo cimiento es la caída del barbosismo. Me explico, la imagen visible del barbosismo es Verónica Vélez quien fue defenestrada.
Hace unos días salió como “directora” de SET y paradójicamente llegó Pedro Gómez a quien años antes ella echó por la puerta de atrás porque supuestamente había robado, que le quería quitar el súper puesto que tenía y ya saben puras chaquetas mentales.
Hoy Pedro Gómez tomó posesión de SET. De aquella oficina de la que Vero Vélez lo corrió de la manera más ruin. Ahora ella le tendrá que entregar a él. Ojalá Pedro nos relate ese instante.
Y bueno, con su llegada a SET no solo es el fin de una era de terror. Vienen las venganzas, porque hubo quienes se metieron con asuntos privados.
Hubo quienes le jugaron al chingón o la chingona, se sintieron intocables, Dios todo poderoso y se metieron con lo más sagrado para las personas con escrúpulos y moral.
Hay a quienes solo les interesa el dinero, pero hay otras personas que aman a sus familias. Y ahí sí duele, duele gacho y en esa medida es el pago de facturas.
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Yonadab Cabrera Cruz / Los amantes del poder
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