No nos hagamos los ingenuos. Las elecciones en las juntas auxiliares son usadas por los partidos políticos para asentar la base de su estructura electoral y son, en el 99% de las ocasiones, operadas desde las presidencias municipales.

Sin vigilancia del órgano electoral, organizadas por los Ayuntamientos, éstos se vuelven juez y parte y solo los de verdad inexpertos pierden en ellas. Como pasó este fin de semana en algunos municipios.

Si esto lo sé yo y lo sabemos todos, por qué se permite que su organización se lleve a cabo de esta forma.

Es esa organización, la que el Instituto Electoral del Estado (IEE) se niega a asumir, la que causó el caos de este fin de semana.

No es nuevo eh, porque ya leo a varios diciendo que el alcalde de Puebla, Eduardo Rivera fue incapaz de mantener el control en los plebiscitos y bla bla bla. Politizando el tema.

También pasó en el anterior proceso, y en el anterior y en el anterior.

Con Claudia Rivera, de Morena, como alcaldesa de Puebla, en enero del 2019 se cancelaron cinco: San Pablo Xochimehuacan, la Resurrección, Ignacio Romero Vargas, San Felipe Hueyotlipan y San Sebastián Aparicio.

Este día se cancelaron ya los comicios en tres: Canoa, Hueyotlipan y Xochimehuacán, mientras que la Romero Vargas está en veremos, pero se prevé que también sea anulada.

En todo el estado, hasta este momento, se han cancelado más de 20. Aquellas en donde los disturbios, provocados por los habitantes, no permitieron la votación.

¿Sirven las juntas auxiliares?

¿Los plebiscitos deberían ser organizados por el órgano electoral?

Son respuestas que se deben empezar a buscar ya, porque cada elección es el mismo cuento. Además, son muy pocos los ciudadanos que de verdad se involucran o que siquiera conoce que existe este “proceso electoral” o que saben si quiera que su colonia está en una junta auxiliar.

Sino es así, esto pasará elección tras elección.

El bebé Tadeo

El caso del bebé encontrado en un contenedor de basura en el Penal de San Miguel, en Puebla, ha traspasado fronteras y llegado a los medios de comunicación internacional.  

La indignación que nunca llegó a la sociedad poblana, sí está en las crónicas de renombrados periodistas nacionales e internacionales.

Este fin de semana la Fiscalía General del Estado dio un avance sobre el caso: el cuerpo fue exhumado de un panteón en la Ciudad de México, se descarta que la finalidad haya sido la de introducir droga al penal, y ya tienen identificados a los responsables, aunque esa información se mantiene bajo resguardo.

Quedan aún dos grandes incógnitas ¿Quién y por qué lo puso ahí?

La infinita cantidad de respuestas que se pueden imaginar son las que tienen el caso en la mira mundial. Ha puesto en la mira al penal de San Miguel y su situación, de acuerdo con Derechos Humanos, y hasta al gobierno de Puebla.

La Fiscalía no ha apagado ese incendio porque temen que si dan información de más los responsables logren evadirse, pero si el caso sigue más tiempo sin estas respuestas, los huecos seguirán llenando las primeras planas de los medios más importantes.

Y es que un bebé muerto en la basura de un penal, es razón más que suficiente.