El Poder Judicial, entrampado entre el ego y los grupos

La situación del Poder Judicial de Puebla se enrareció de unos meses a la fecha. 

Hasta antes del fallecimiento del gobernador Miguel Barbosa Huerta, había por lo menos la intención de respetar tanto al Consejo de la Judicatura como la figura de la magistrada presidente. 

Había cierta concordancia y hasta equilibrio entre Margarita Gayosso Ponce y Carlos Palafox Galeana. 

O por lo menos había buena mímica de que entre el Consejo de la Judicatura y la Presitencia del Tribunal había colaboración y coordinación. 

Pero, una vez fallecido el gobernador Barbosa y desatados los ánimos y el ego de algunos personajes en el Poder Judicial, las cosas cambiaron bastante. 

Si bien, desde el gobierno de Miguel Barbosa se tejió una confusa y muy ambiciosa Reforma al Poder Judicial, se empujó prácticamente a la salida de Héctor Sánchez Sánchez no se logró del todo la colonización del Barbosismo.

Solamente llegó Carlos Palafox y el Barbosismo no se hizo de los espacios de los espacios de magistrados pendientes. 

Una vez que el Barbosismo se desmoronó vino el quiebre de Margarita Gayosso Ponce y de Carlos Palafox Galeana.

Quiebre que se nota a leguas en las redes sociales del Poder Judicial y el Consejo de la Judicatura donde parece más la pasarela de Palafox. 

Sus diálogos, entrevistas, sus visitas. Vaya, ni el Día Internacional de la Mujer, ni en marzo cedió espacio para siquiera ceder el espacio a Margarita Gayosso, primer magistrada en presidir el Poder Judicial en la historia del estado. 

En la realidad el Poder Judicial está entrampado entre los muchos grupos que existen y el ego del titular del Consejo de la Judicatura. 

Carlos Palafox se siente afianzado por grupos de jueces y magistrados. Hoy por hoy, el Poder Judicial en Puebla se nota más dividido. 

Dicen los que saben que al menos hay tres grupos. 

1. Los misóginos. 

Literal este grupo fue el primero en molestarse por el nombramiento de Margarita Gayosso Ponce. Este grupo se radicalizó con la muerte de Barbosa y fue a tocar la puerta de Palafox.  Ellos en privado dicen “estar hasta la madre” de las juezas, magistradas e integrantes del Consejo de la Judicatura. Es el grupo más peligroso para la magistrada presidenta pero están bien identificados aunque sean los más hipócritas. 

  1. Los podridos

Así apodan al grupo de jueces y magistrados borrachos, corruptos, fanáticos de la francachela y hasta de las horchatas. Y no hablo precisamente del agua de horchata. 

Estos piden que los dejen seguir haciendo sus negocios. Son los más peligrosos para el futuro y la imagen del Poder Judicial pero parece que ya cuentan con un puente de plata en el Consejo de la Judicatura.

  1. Los mustios

Este tercer grupo lo integran los mustios, que son jueces y magistrados que en apariencia hacen todo conforme a la ley. Así es sostienen las leyes con una mano pero cobran con la otra. Ya sabe, esos que puede que liberen mañana un pez gordo en cualquier audiencia de control de detención y que cuentan con los errores desde la Fiscalía para hacer negocios, ah eso si, siempre amparados con que cumplieron con la ley. 

Lo peor de todo esto es que el presidente del Consejo de la Judicatura tiene bien medidos a estos tres grupos de jueces. 

Eso es lo más grave. Palafox hizo migas con todos los grupos. 

Y parece que el Poder Judicial está tocando fondo. 

¿De verdad servirá la Reforma al Poder Judicial que presumió el extinto Barbosismo?

Este, el momento más oscuro en el Poder Judicial de Puebla podría ser buen momento entonces para empezar a aplicar precisamente esos dientes de los que dotaron a la oficina que preside Carlos Palafox Galeana. 

¿Lo hará? ¿O usará este espacio como los otros trampolines por los que pasó previamente en el servico público?

El tiempo lo dirá. 

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Edmundo Velázquez

Edmundo Velázquez

Es egresado de la carrera de Ciencias de la Comunicación por la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP) y cursó la maestría en Periodismo Político en la Escuela de Periodismo Carlos...