El alcalde de Puebla, Eduardo Rivera Pérez apuntó que su gobierno no busca legalizar el trabajo de las sexoservidoras del Centro Histórico de la ciudad, sino ofrecerles alternativas para mejorar su seguridad.
Esto luego de que la Secretaría de Gobernación municipal planteara la reubicación de las sexoservidoras del Centro Histórico de Puebla en 16 casonas y moteles para que puedan trabajar y que tengan mayor seguridad que en las calles.
El presidente municipal dijo que no se busca ni instalar lugares exclusivos para ellas ni tampoco legalizar el trabajo de las sexoservidoras en la ciudad, pues esto estaría fuera de la ley, por lo que aseguró que su gobierno será muy responsable al respecto de este tema.
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Asimismo, Rivera Pérez reiteró que el trabajo de atención a las sexoservidoras del Centro Histórico se está haciendo en coordinación con la Secretaría de Igualdad Sustantiva, la cual es la instancia encargada de empatizar, dialogar, acercarse y ayudar ofreciendo distintos apoyos a las mujeres dedicadas al sexoservicio.
El gobierno de la ciudad no está buscando que se instalen en algunos lugares exclusivamente y legalizar ese tipo de situaciones porque la ley no lo permite, y hay que ser muy claros y responsables al respecto de esta situación”.
Desde el inicio de la administración de Eduardo Rivera, se buscó inhibir la presencia de sexoservidoras en las calles del Centro Histórico. Sin embargo, también mencionó que estaba en contra de que existiera una zona de tolerancia para el sexoservicio, ya que no era opción en la capital y rechazaba la idea de su creación.
Sexoservidoras trabajan en los hoteles del Centro Histórico de Puebla
Desde el pasado mes de febrero, las sexoservidoras del Centro Histórico han encontrado en los moteles y casonas de la zona un lugar alternativo para trabajar.
En un especial realizado por PÁGINA NEGRA, precisamos los lugares que han abierto en las calles 5 de Mayo y 18 Poniente, como lugar de trabajo para las sexoservidoras, que son algunas casonas se encuentran adaptadas con varias habitaciones y un espacio en donde las mujeres esperan a los clientes.
A decir de las mismas sexoservidoras, se sienten más seguras en estos lugares, asimismo, se apoyan entre ellas cuando un cliente se pone pesado. En los servicios usan condones y también en el lugar los clientes pueden adquirirlos en máquinas expendedoras.
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