Tuvieron que pasar tres décadas para que la Selección Mexicana regresara a Tegucigalpa para enfrentarse a Honduras. En el cual se definirá un boleto para la Copa América del próximo año.
En 1993 la Selección Mexicana bajo las órdenes de Miguel Mejía Barón llegó a la capital hondureña. Con el objetivo de sumar puntos en el desarrollo de las eliminatorias para el mundial del 94.
De acuerdo con los relatos del ex futbolista Alberto García Aspe para una entrevista al portal “Medio Tiempo”. El camión que lo trasladaba tanto a él como al resto del equipo. Fueron agredidos con pedradas e insultos. Todo esto, porque un periodista catracho detalló que el partido era una “guerra”.
Pero eso no fue todo. Según el exfutbolista, el cuerpo técnico logró saber que la afición hondureña tenía planeado realizar una molesta serenata. Con el objetivo de causar estragos en el descanso de la Selección Mexicana, lo que causó un sin fin de molestias en Tegucigalpa, Honduras.
“Fue muy importante que se investigara que nos iban a llevar serenata al hotel, porque así nos pudieron cambiar. A los 11 que íbamos a jugar, Javier Aguirre nos sacó en una ‘carcachita’ que consiguió, y nos sacó por el sótano, y la gente estuvo con su serenata, pero no estábamos nosotros. Un día antes tampoco nos dejaron entrenar”. Comentó García Aspe para Medio Tiempo.
La Selección Mexicana goleó a Honduras pero se armó la bronca
En las acciones del partido, un 2 de mayo de 1993 pese a todas las hostilidades de los “catrachos”. La Selección Mexicana se fue al frente en el marcador en Tegucigalpa sobre Honduras al minuto 2 con gol de Alberto García Aspe.
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Posteriormente, Luis Flores al 44´ marcó el segundo tanto para irse tranquilos al descanso. Luego el combinado nacional volvió a dar otro golpe sobre la mesa con el gol de Luis García. Por su parte los locales dieron señales de vida al 56 del tiempo corrido gracias a la anotación de Juan Flores.
Cerca del final del partido Richardson Smith marcó un autogol, el cual le dio el triunfo a la Selección Mexicana 4-1, pero el ánimo en Tegucigalpa explotó tras la derrota de Honduras.
Sobre el final del partido las cosas en el terreno de juego se calentaron y comenzaron a haber patadas por ambos lados.
Así mismo, al término del compromiso la seguridad del inmueble, solicitó a los mexicanos aguardar en la zona de vestidores. Hasta que los aficionados centroamericanos desalojaran el estadio y los alrededores.
Una semana después de lo sucedido, México aseguró su pase al Mundial de Estados Unidos 1994 tras derrotar a Canadá con gol del “Abuelo” Cruz.
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