Por ser mujer y policía te exigen doble: Jéssica, agente de San Andrés Cholula

La agente de la Policía Municipal, Jéssica Pamela Pérez de Román, lleva nueve años en las filas de la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Ciudadana de San Andrés Cholula (SSPPC) y porta orgullosa el uniforme aunque admite que la tarea no ha sido sencilla: “Al ser mujer y policía no te perdonan, es más, te exigen doble”.

Así ha sido la vida de Jéssica, dividida entre ser madre de dos hijos, dormir poco y seguir preparándose. La entrevista con PÁGINA NEGRA la concedió en el marco de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, en un breve descanso que tuvo después de su curso de idiomas para especializarse con la atención a turistas para la próxima temporada vacacional.

En la plática la uniformada explicó cómo fue que su familia influyó en elegir su carrera como agente de policía, cómo divide su vida entre ser madre y cómo, desde su trinchera educa a sus hijos para que el machismo caiga un día. “Ya van mejorando las cosas. Ya cada vez hay más mujeres y cada vez confían más en una mujer para ser mando”, comentó.

La culpa la tuvo el uniforme

Cuando se le pregunta a Jéssica en qué momento pensó en ser uniformada inmediatamente le viene el recuerdo de su padre usando el uniforme:

Yo inicié porque desde chiquita me gustaba el uniforme. Cuando veía a mi papá uniformarse. Vengo de una familia de policías. Mi papá fue policía, mi hermano también. Fueron policías de otros municipios pero ya no ejercen.

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Jéssica jamás pensó en eliminar sus sueños así tuviera que trabajar doble o combinar el ser madre de familia y una profesional en temas de seguridad. Aunque esté de turno un día de su vida se divide entre sus hijos y su trabajo.

Tengo dos hijos. Sí es un poco complicado porque mi turno es de 24 horas y al otro día tengo que llegar y atender a mis hijos. Ayudarles a su tarea. Sí es complicado porque llegó desvelada y tengo que dormir un rato. Levantarme y darles de comer. Atenderlos. A veces no tengo ni tiempo de jugar con ellos.

“El machismo va en declive”

Cada vez más mujeres forman parte de las filas de las corporaciones municipales, estatales y federales de seguridad en Puebla y el país. Jéssica asegura que ha visto cambiar poco a poco las cosas. De inicio sí sufrió el

En los años que llevo como policía sí llegué a tener ese problema un poco. Actualmente ya es muy raro que llegue a haber algún compañero que sea machista pero todavía, de repente, hay compañeros que sí lo son, comentó.

Ella misma, desde su casa, ha comenzado a cambiar en su casa y con la educación a sus hijos:

Les digo que a la mujer siempre se le debe de respetar, que vean mi ejemplo como mamá, que trabajo en un lugar donde la mayoría son hombres y que por eso deben siempre siempre respetar a la mujer, quererla, tratarla bien.

–¿Ser policía y ser mujer es un trabajo doble?
–Sí. Desde el primer momento en que entré a trabajar, empecé a darme cuenta que era complicado ser policía y ser mamá, las dos cosas a la vez por la misma situación de los turnos que son cansados y que es un poco complicado trabajar un día completo, no verlos, extrañarlos. Es complicado. Ahí entendí que era difícil ser mamá y ser policía.

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