Estudiantes de la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP) realizaron un plantón este viernes en el Tribunal Superior de Justicia del Estado para exigir la devolución del campus, luego de sumar cinco meses desde la toma de las instalaciones por parte de un nuevo patronato.
Al grito de “Ríos Piter entiende, la UDLAP no te quiere”, los manifestantes exigieron que el patronato encabezado por Horacio Magaña Martínez cumpla con las suspensiones que ordenan la devolución de la universidad, a la dirección histórica.
Señalaron que este viernes es el último día de clases y no pudieron volver a las aulas durante el primer periodo.
Es el último día de clases en la universidad y no hemos podido regresar a clases, estamos aquí defendiendo nuestro derecho esta manifestación es pacífica con respeto y civilidad. Por lo cual, aclaramos que cualquier acto de violencia es ajeno a todos nosotros”.
Resaltaron que la vía armada no es la respuesta y el juicio que llevan a cabo afecta a más de 10 mil estudiantes mexicanos y extranjeros, así como a más de mil profesores.
Además, los trámites se han frenado y los estudiantes que estaban desarrollando investigaciones no han podido concluir sus trabajos por la falta de instrumentos.
La vía armada no es la respuesta, ellos están acusando de un juicio que han salido apelaciones fallidas en su contra, ya tenemos suspensiones definitivas y se siguen ignorando, no nos entregan nuestro campus y no lo podemos permitir, trámites están frenados, compañeros no pueden seguir con investigaciones”.
Fue el 31 de junio, cuando un nuevo patronato tomó las instalaciones de la UDLAP, pese a que el exrector, Luis Ernesto Derbez Bautista dijo que era un acto arbitrario, ya que contaban con un amparo que impedía que los bienes y derechos de la universidad fueran privados.
El pasado 9 de noviembre, el apoderado legal de la Fundación de las Américas Puebla, Rodrigo Gurza Cárdenas, reveló que la universidad tiene un déficit de 300 millones de pesos por el robo de colegiaturas, a través de la simulación de contratos y desvío de recursos a empresas fantasmas.
Detalló que se hicieron contratos simulados y compraron facturas falsas para desviar los recursos de la universidad que se obtienen a través de las colegiaturas; el déficit ya se encuentra sujeto a una investigación por parte de las autoridades.