Santiago Reyes Quesada, “El Jimmy”, por su habilidad para fugarse de las prisiones, fue uno de los criminales más famosos de nuestro país. En el mundo del hampa lo conocían como “El Capitán Fantasma”.
El 30 de octubre de 1970, agentes del Servicio de Investigaciones trasladaron a Santiago Reyes a la Penitenciaria del Estado. Unos días antes, las autoridades de la Cárcel Municipal de San Juan de Dios descubrieron que “El Capitán Fantasma” tenía un plan para fugarse del penal.
“El Jimmy” cumplía una sentencia de 14 años en prisión por una serie de robos que perpetró en la ciudad de Puebla; además, tenía que pagar otra condena de 16 años por el asesinato de su compañero de celda, Evodio Cruz, crimen del que se decía inocente.
Traslado
Los ladrones de la época admiraban a “El Capitán Fantasma” por su ingenio para delinquir. Sin embargo, Felipe Ávalos Machorro, entonces director de la Cárcel Municipal de San Juan de Dios, lo describió como un maleante que, debido a su edad, ya no contaba con las facultades físicas que lo convirtieron en unos de los criminales más peligrosos del país.
El director de la Cárcel Municipal, inmueble que se encontraba en la calle 5 de Mayo y la Avenida 18 Oriente, explicó que el delincuente, al cometer una serie de ilícitos vestido de militar, creo un mito sobre su persona; además, señaló que la gente lo imaginaba como un sujeto con la capacidad de idear todo tipo de planes para escapar de la prisión, pero, en realidad, sobornaba al personal de los reclusorios para que lo ayudarán a saltar un muro de una altura considerable.
Roberto Rodríguez Ramos, entonces comandante del Servicio de Investigaciones de la Jefatura de Policía, estuvo a cargo del traslado de “El Jimmy” a la Penitenciaria del Estado, edificio que se ubicaba en la Avenida Reforma y la calle 13 Sur, en la prisión ocupó la celda 231 del tercer piso, zona en donde recluían a los homicidas que pagaban largas condenas.
En un principio, “El Capitán Fantasma” se opuso al traslado porque pensó que era una excusa para que lo asesinaran a fuera de la cárcel, pero cuando le mostraron la orden de Marco Antonio Rodríguez Flores, quien fue director de Gobernación, aceptó la disposición. Meses antes, “El Jimmy” hizo el intentó de suicidarse, porque no quería pasar el resto de su vida en prisión.
Con información de José Luis González Gallo y Francisco J. Corona, reporteros de El Sol de Puebla.