Dios los hace y ellos se juntan, aunque es posible que el Diablo haya tenido que ver —en algunas ocasiones— con la unión de dos personas que a pesar de sus extravagancias no son precisamente compatibles. Por ejemplo, cualquiera habría jurado que Dita Von Teese y Marilyn Manson eran la pareja ideal; el sólo pensar que entre estas dos figuras completaban un amor al que podríamos catalogar como oscuro y 100 % compatible. Tanto Marilyn como Dita son iconos importantes para una subcultura que se aferra al rock y a las sombras como un estilo de vida; así que el hecho de que estuviesen juntos era digno de celebrarse.
Lamentablemente para los fans, el romance no duró demasiado. Se habla de infidelidades o de esa monotonía en negro que al parecer los asfixiaba cada que tenían que presentarse juntos en una alfombra roja o cualquier evento público. Probablemente lo que Manson necesitaba era algo, por decirlo de alguna manera, menos como él y un poco más parecido al mundo real.
Si bien Lana del Rey tampoco es una mujer a la que podríamos catalogar como alguien común, la relación que sostuvo con Manson nos cayó de sorpresa. ¿Cómo es que alguien que ha encaminado su carrera hacia el pop podía estar saliendo con uno de los líderes indiscutibles del metal industrial? Antes de que decidamos continuar con este drama, es necesario recordar que debajo de todo el maquillaje y alejados de las cámaras, ambos son personas normales. No importa su carrera, ni siquiera a qué se dediquen, ambos se sintieron atraídos y eso es lo realmente importa.
Para justificar una relación como esta —que, de nuevo, no tendría por qué parecernos extraña— podríamos citar teorías y creencias que vienen desde la Antigua China y el taoísmo, el ying y el yang o cualquier juego de dualidades que existe en el mundo, las cuales indicarán siempre que ambos cantantes nacieron para estar juntos al menos durante un tiempo corto. El momento perfecto para que estas dos fuerzas se unieran fueron los premios Echo, donde ella estaba nominada y él sería el presentador.
Una vez terminada la ceremonia, algunos paparazzis captaron a ambos subiendo al elevador del hotel de Manson donde posiblemente compartirían algo más que tragos, pero la pregunta que incesantemente debe golpear nuestra mente en este tipo de situaciones es ¿por qué debería sorprendernos? Más allá de Dita Von Teese, Manson había salido con por lo menos otras cuatro personas que no eran precisamente Morticias o Merlinas de la vida real y nadie se había preguntado la razón de estas relaciones; no obstante, al ser Lana una figura actual, su vida personal sí que nos interesa.
Finalmente, tengan una relación o no y sin importar quién haya hecho hasta lo imposible para unirlos, el público nunca estará contento. Pues primero se quejarán de que "no combinan" para, una vez que hayan decidido poner fin a todo, la gente comenzará a extrañar esa relación en la que dos polos opuestos finalmente se encontraron; en tal caso, lo que deberíamos hacer es vivir y dejar que los demás hagan su vida como ellos quieren sin importar cuánto los odiemos o admiremos.