El cáncer de piel es el más común alrededor de todo el mundo. Existen tres tipos de cáncer: el carcinoma basocelular, el carcinoma epidermoide y el melanoma. Cada uno de ellos tienen características distintas y es necesario detectarlos a tiempo.
El más común de los tres en el mundo y por supuesto en México es el carcinoma basocelular.
Afecta la cara, la frente, la nariz, haciendo un triángulo hacia los labios, aparece lesión que mucha gente lo refiere como un barro, luego sale una costra y es una lesión que nunca termina de curarse.
Este cáncer es el que más se opera en México con el 70 por ciento de los casos.
También está el carcinoma epidermoide que afecta otras capas de la piel sobretodo en las orejas, el dorso de las manos. El crecimiento es indolente, lento y se caracteriza por que salen escamas en la superficie de la piel.
El tercero y más peligroso es el melanoma, porque puede poner en riesgo tu vida. Aparece principalmente en las palmas de las manos, plantas de los pies, debajo de las uñas y es importante tener detectados los lunares que se nos presentan a través de los años, su crecimiento, simetría, entre otros aspectos.
La causa número uno de cáncer es la exposición a la radiación solar, aunque también las personas que trabajan en minas o están expuestas al arsénico, aguas contaminadas, que tienen lesiones de años atrás como una quemadura, pueden ser propensas a cualquiera de estos tres tipos de enfermedad.
Es primordial el diagnóstico temprano, si llegamos a quitar el cáncer en una etapa temprana se resuelve, se quita la lesión y se acabó el problema.