AC/DC es más que el soundtrack de IronMan y IronMan 2. Si bien muchos descubrieron el poderoso rock de los Young por las películas de Robert Downey JR., lo cierto es que la banda formada en Australia tiene más de 40 años.
En 1978, la banda liderada por los hermanos Malcolm y Angus Young estaba en un impasse: tras de sí tenían cuatro discos de estudio y uno en vivo, eran conocidos en Australia e Inglaterra, pero no habían dado el paso que los diera a conocer mundialmente, sus ventas rozaban los límites mínimos que exigía la disquera para mantenerlos en su catálogo.
Con su último álbum, el directo If You Want Blood You've Got It! estaban por cerrar su contrato con la disquera Atlantic. Si esto no ocurrió fue por Ahmet Ertegun, uno de los fundadores de esta disquera, se empeñó en no dejarlos ir. Ertegun sabía que la banda tenía un potencial como pocas, todo era cuestión de saberlo manejar. Así, en plena junta con los directivos, no sólo se opuso a rescindir el contraro de AC / DC (como querían estos), sino que propuso duplicar el presupuesto para el siguiente disco.
De muy mala gana, los directivos de Atlantic aceptaron y tras la gira para promocionar If You Want Blood You've Got It!, comenzaron las reuniones para planear lo que sería el primer gran álbum de AC / DC: Highway To Hell”.
El primer cambio que ocurrió fue el del productor: para el nuevo disco se contrató a Eddie Kramer, quien era famoso pues ayudó a sacar discos de The Beatles, Led Zeppein, Carlos Santana y Kiss.
Sin embargo, entre Kramer y la banda no hubo química, había mucho material, pero no era del gusto de los Young, y al final dejaron de trabajar con él; lo que les acarreó un problema más con la disquera (este no sería el caso de que entre las fricciones saldría un gran disco, como en el caso de Metallica con Bob Rock, de cuya relación conflictiva relación surgió el Black Album).
AC/DC estaban con mucho material pero sin saber qué iba a pasar con ellos. Fue cuando apareció Robert John “Mutt” Lange, quien luego de escuchar las maquetas de las primeras canciones, estuvo seguro de que podrían hacer un álbum que renovaría el rock británico.
Y tuvo toda la razón
“Highway to Hell” salió el 27 de julio de 1979, y desde ese momento se convirtió en el más popular de la banda y el que, finalmente, los colocó como una de las bandas de hard rock más potentes de toda la historia. Nunca llegó al número uno de las listas mundiales, pero se mantuvo siempre en los primeros lugares, pasando con el paso del tiempo a ser un referente en la cultura popular.
Consideremos, ahora sí, por ejemplo el soundtrack de IronMan.
Después de la tragedia, el renacer
Más allá de los millones de ventas, de las giras interminables, “Highway To Hell” es considerado como el legado de Bon Scott, quien murió el 9 de julio de 1980 por una congestión alcohólica, justo cuando la banda estaba en lo más alto.
Muchos pensaron que ese sería el final de AC/DC, y con justa razón. Como pasa en muchas agrupaciones, la combinación de elementos, en este caso el vocalista y la guitarra principal, forman parte importantísima de la identidad de la banda (ahí están los casos: Mick Jagger y Keith Richards, Axel Rose y Slash). Sin Bon, AC/DC no era AC/DC
O eso se creyó.
La banda decidió unirse y jugarse el todo por el todo, y siempre pensando en un homenaje a Bon, en 1980 sacaron “Back in Black”. La nueva voz era la de Brian Johnson, quien supo que el hueco dejado por Scott nunca se podría llenar, por lo que se dedicó a crear su propio lugar, y con esa peculiar voz supo darle una nueva identidad a AC/DC.
AC/DC consiguió entonces lo que muy pocos: renacer con un álbum que se colocó al nivel de “Highway To Hell” y, para muchos, lo superó (hasta ahora es el segundo álbum más vendido en la historia del rock).
Pero, discusiones aparte, nadie puede negar la genialidad de “Highway To Hell”, y en RAYAS queremos celebrar sus 40 años.