El partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) en Puebla iniciará la cacería de morenovallistas, pues desde el Congreso local buscarán reabrir las cuentas públicas e investigar casos de corrupción de los personajes allegados al exgobernador, Rafael Moreno Valle. El primero en la lista es Jorge Aguilar Chedraui por el supuesto mal manejo del recurso cuando fungió como como titular de Salud.
Fue el propio Aguilar Chedraui quien a través de su cuenta de twitter compartió una columna de El Sol de Puebla en la que se informó sobre la reapertura de sus ejercicios fiscales. El morenovallista tachó esta acción de “un mensaje siciliano” y que, según él, no abona a la reconstrucción de la paz en Puebla.
Ya había escrito de esto en la cuenta de TW que me “bajaron”. Qué lástima que todo se quiera resolver con amenazas y mensajes Sicilianos. Pobre de Puebla en este momento donde todos están más preocupados por destruir que por construir. pic.twitter.com/3mKAsF12vR
— Jorge Aguilar Chedraui (@JACHPuebla) 24 de junio de 2019
Aunado a esto, el panista comenzó una pelea en redes con el actual presidente de la Junta de Gobierno del Congreso de Puebla, Gabriel Biestro Medinilla, a quien le exigió que se pusiera a trabajar en lugar de generar “grillas” y “amenazas”.
Con esos mismos señalamientos en el pasado me quisieron sacar de la jugada y aquí sigo. El que nada debe, nada teme y el que acusa, está obligado a probar. Déjense de grillas y amenazas y PÓNGANSE A TRABAJAR. #ConGenteComoUstedes #PobrePuebla@AccionNacional @MarkoCortes https://t.co/LLSGToPKIc
— Jorge Aguilar Chedraui (@JACHPuebla) 25 de junio de 2019
En respuesta, el morenista dejó entrever que sí revisarán sus cuentas públicas, pues le recordó sobre los actos de corrupción en los que está implicado.
“También habrá que ver tus evaluaciones respecto a los escándalos de corrupción en los que estás implicado”.
También habrá que ver tus evaluaciones respecto a los escándalos de corrupcion en los que estás implicado.
— Gabriel Biestro (@Biestro) 25 de junio de 2019
Asimismo, Biestro Medinilla evidenció que personal del Congreso de Puebla acusó “malos tratos” de Aguilar Chedraui y que tienen pruebas de las “mañas” que aplicó durante su gestión como presidente de la Junta de Gobierno en la legislatura pasada.
No, si aquí mismo los trabajadores cuentan de tus tratos, tus modos y tus mañas, tienes una pésima imagen. No somos iguales, no somos corruptos, ni venimos a simular, ni a arrastrarnos indignamente como tú lo haces. Lo bueno es que gente como tú no regresará.
— Gabriel Biestro (@Biestro) 25 de junio de 2019
CENTRAL buscó a la presidenta de la Comisión Inspectora, la morenista, Olga Lucía Romero Garci Crespo, quien no descartó que se revisen las cuentas públicas de Aguilar, pues dijo “que revisarán todas las cuentas que tengan que ser revisadas”.
Sin embargo, evitó mencionar cuándo se llevaría a cabo el proceso de revisión de las cuentas públicas.
Estas son las razones por las cuales se reabrirían las cuentas públicas de Jorge Aguilar Chedraui
En 2017, CENTRAL publicó que el exsecretario de Salud creó un modus operandi que consistió en rehabilitar y ampliar unidades médicas en el estado, que después fueron derribadas y sustituidas por los famosos Centros de Salud con Servicios Ampliados (CESSA), con lo que provocaron un quebranto por 165 millones 252 mil pesos
El negocio millonario continuó en la construcción de los nuevos centros de salud, pues Aguilar Chedraui y sus operadores, Gabriel González Cossío y Eduardo Letayf Acar, triplicaron los costos de 25 Centros de Salud por los que pagaron Mil 139 millones de pesos —en 21 mil 756 pesos el metro cuadrado—, cuando de acuerdo con constructores consultados por CENTRAL debieron haber costado 334 millones 894 mil pesos, 7 mil pesos el metro cuadrado.
De acuerdo con los contratos de obra entregados directamente por la Secretaría de Salud de 2011 a 2015, se pudo corroborar que sin sentido se licitaron al por mayor obras para dar mantenimiento, ampliar o rehabilitar, centros de salud que, de antemano, sabían que serían derrumbados para construir nuevos edificios. Es decir, la dependencia pudo haber ahorrado los 165 millones de pesos que gastó en estas obras temporales y solo gastar en la construcción de nuevos edificios.
Uno de los casos más dramáticos fue el de Acatlán de Osorio, pues durante la gestión de Aguilar Chedraui se aprobó que al Hospital Regional se le diera mantenimiento en 2011 con un monto de un millón 990 mil 353 pesos. Un año después se amplió y le inyectaron recursos por 56 millones 951 mil 771 pesos. En total se invirtieron 58 millón 942 mil 124 pesos en trabajos que no se sabe si se llevaron a cabo.
No obstante, el gobierno de Puebla decidió derribarlo para construir ahí un Centro Integral de Servicios (CIS) — de 20 millones 562 mil 355 pesos—, y gastar 142 millones 855 mil 351 pesos en un nosocomio nuevo que el presidente de la República, Enrique Peña Nieto vino a inaugurar en 2014.
Otros de los nosocomios en la lista negra fueron el Centro de Salud de Amozoc, que permaneció en ruinas a pesar de la inversión de más de un millón de pesos para su rehabilitación. Lo mismo pasó con el Centro de Salud de San Pedro Cholula, pues estaba cubierto de hierbas y la obra quedó completamente abandonada.