Javier Lozano no tiene remordimientos por la extinción de Luz y Fuerza del Centro (LyF). Después de 10 años de que el gobierno de Felipe Calderón Hinojosa publicara el decreto para desaparecer la paraestatal y dejar sin trabajo a 44 mil trabajadores, el ex secretario de Trabajo insiste en que fue la mejor decisión, incluso se dice orgulloso de haber participado en dicha operación, hasta reconoce por primera vez que gobernadores del PRI y Marcelo Ebrard, entonces jefe del Distrito Federal, respaldaron la propuesta.
El ex funcionario federal recibió a CENTRAL en su departamento de la Ciudad de México, desde su ventana se aprecia la Avenida Reforma, los helipuertos y grandes edificios que decoran todos los días su hogar y le brindan una bonita vista de la capital del país.
Sentado en uno de sus sillones cafés, asegura que desde 1985 se planeaba la desaparición de Luz y Fuerza del Centro. Incluso, el gobierno de Miguel de la Madrid ya tenía todo listo para llevar a cabo la privatización, solo que se atravesó el sismo del 19 de septiembre de ese año y el plan se echó para atrás.
Con ironía y una sonrisa en la cara, el ex secretario de Trabajo y Previsión Social reconoce que usaron como distractor el partido de México vs El Salvador que era el pase para el Mundial, y que se jugó la noche del sábado 10 de octubre de 2009, para tomar las instalaciones de Luz y Fuerza, debido a que la mayoría de los trabajadores estarían de fiesta o atentos al partido.
También manifiesta que Luz y Fuerza operaba en números rojos, una de las razones por las que se decidió extinguir a la paraestatal. Según él, siempre fue ventajoso el Contrato Colectivo de Trabajo del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), por lo que también había un sobrecupo de trabajadores.
Sin embargo, los ex trabajadores que fueron entrevistados para este especial, difieren de su opinión, al sentenciar que el hecho de que les quitaran su fuente de trabajo fue más una decisión política que por la deficiencia de la empresa y los “supuestos números rojos”.
Foto: Sam Navarrete
Los gobernadores del PRI y hasta el perredista Marcelo Ebrard nos respaldaron
Lozano menciona que los gobernadores del PRI en las entidades donde operaba Luz y Fuerza como el propio Enrique Peña Nieto, en el Estado de México; Mario Marín, en Puebla; Miguel Ángel Osorio Chong, de Hidalgo; el panista Marco Adame Castillo de Morelos y hasta el perredista Marcelo Ebrard, ex jefe de Gobierno del Distrito Federal, estuvieron de acuerdo con la decisión.
Algo muy importante es que los gobernadores de la zona centro, priistas nos apoyaran. Ellos se enteran unos días antes, no salió nada y Peña Nieto era gobernador del Estado de México y tenías a Osorio Chong en Hidalgo en la Tierra de Martín Esparza (líder del SME) En Puebla estaba Mario Marín, todos, hasta con Ebrard había que estar bien. Cada quien hizo un buen equilibrio entre una posición política y la verdad respaldaron al gobierno de la República porque ellos mismos sabían que esto era insostenible y cuando hablas las cosas con mucha sinceridad, cuando explicas las cosas con papeles en la mesa, técnicamente, eran trasferencias de 43 mil millones de pesos al año de subsidio para mantener a Luz y Fuerza, era el doble de lo que le dábamos a la UNAM”.
México vs El Salvador, fue el distractor para que los trabajadores no reaccionaran
Además, el ex senador de la República también reconoce que planearon tomar las instalaciones de la paraestatal, la noche del sábado 10 de octubre del 2009 se jugó el partido de futbol de la selección mexicana contra El Salvador, ambas se jugaban el pase al Mundial y sabían que los trabajadores estarían atentos al encuentro, por lo que no reaccionarían a tiempo ante la estrategia del gobierno federal.
Sabíamos que era un día de fiesta, México vs El Salvador, pasamos al Mundial. No se imaginaban nada de esto. Aquí las cosas las hicimos muy bien y no se filtró absolutamente nada, no estaba de nuestro lado Martín Esparza, estaba realmente furioso, furioso (…) fue una decisión valiente del mismísimo presidente Felipe Calderón y yo con mucho orgullo salí a dar la cara, al grado de que iban a mi casa, con mi familia, a intimidarnos, a molestarnos con todo esto”.
Desde 1985 planeaban la privatización de LyF
Según Lozano, la privatización de la paraestatal se venía planeando desde 1985, en el sexenio de Miguel de la Madrid. En aquel año ya estaba todo listo para consumar la estrategia el 12 de diciembre, pero todo se detuvo debido al sismo del 19 de septiembre, pues el dinero finalmente fue invertido para las labores de reconstrucción y todas las energías se centraron en dicha situación.
No fue una idea nueva, la verdad es que esta creencia de que Luz y Fuerza del Centro tenía que desaparecer viene desde la época del presidente De la Madrid, precisamente cuando Bartlett era secretario de Gobernación y Francisco Labastida de Energía y Minas. El propio Labastida me lo platica a mí, tenían todo planeado para el 12 de diciembre de 1985 y qué fue lo que detuvo la extinción: lo único que la detuvo fue el sismo del 19 de septiembre que fue terrible y que cambió la agenda nacional”.
Luz y Fuerza operaba en números rojos
Nuevamente con una sonrisa en el rostro, y de forma tajante, el ex funcionario federal sentencia que la paraestatal operaba en números rojos, que ya no producía energía eléctrica y se la compraba a la Comisión Federal de Electricidad (CFE), por lo que solo era revendedor.
Luz y Fuerza del Centro prácticamente no producía energía, lo que hacía era comprarle en bloque a la CFE y revenderla en la zona centro del país, era un revendedor de energía, pero la compraba, haz de cuenta si tú comprabas 100 unidades perdían 35 por robos o por mermas o por ineficiencias, diablitos y diablotes, imagínate ¿Eso cuándo iba a ser negocio? Nunca (…) era un barril sin fondo”.
Ex trabajadores reviran: eso es mentira
Los extrabajadores escuchan el nombre de Felipe Calderón y en automático les cambia el rostro, no le perdonan que su decreto los echara a la calle. Tampoco comparten la versión oficial de que la empresa operaba en números rojos para extinguirla
Extinguir Luz y Fuerza, fue una cuestión política
Domingo Aguilar, ex subsecretario del SME División Necaxa, dice que la decisión de suprimir la empresa fue una cuestión política, a través de una estrategia de “exprimirlos”.
Revela que no les cobraban energía eléctrica a grandes empresas, ni a dependencias federales, cuya finalidad fue que Luz y Fuerza, dejara de ser rentable mantener a los 44 mil trabajadores de los estados de México, Hidalgo, Puebla, Morelos y el Distrito Federal.
Muchas empresas que no se les cobraba energía, dependencias de gobierno estatal, federal inclusive municipal que no pagaban la energía eléctrica y otras actividades propias de los gobiernos y también cuántas gentes que estaban en el poder en el distrito federal que consumía mucha electricidad, no la pagaba entonces fueron situaciones que era de exprimir a la empresa financieramente”.
Una falsedad que la empresa fuera un organismo ineficiente y corrupto
Roberto Jiménez, presidente de la Fundación Necaxa, culpa a Felipe Calderón y a Javier Lozano de haber orquestado un “robo” al despojarlos de las instalaciones de la hidroeléctrica. Niega que en la empresa se alojara corrupción e ineficiencia.
La postura de Felipe Calderón de decir junto con Javier Lozano que era el secretario de Trabajo, que iban a extinguir un organismo ineficiente, corrupto, y que de alguna forma los trabajadores teníamos grandes prebendas, todo eso fue una falsedad”.
Un pretexto lo de los números rojos
Guillen Cabrera con sus 97 años de edad, aún es consciente de la situación. Tampoco cree la versión de los números rojos. El jubilado fue de las primeras generaciones en Luz y Fuerza y asegura que durante los años que laboró ahí, nunca operó con números rojos y fue un pretexto del expresidente Calderón para extinguirla.
La compañía nunca trabajó con números rojos, estaba bien. Que él sacó eso (Felipe Calderón) fue pretexto para desaparecer la compañía de Luz, pero no creo que haya trabajado con números rojos porque las máquinas son hidráulicas, aquí lo que sobra es agua”.
Nos obligaban a comprarle energía a CFE a un precio más alto
Freddy Alvarado Mejía rechaza el argumento de Lozano y Calderón, porque dice que el tiempo que estuvo laborando para la paraestatal, los obligaban a comprarle energía a CFE a un precio muy alto y después venderla a un costo más bajo, “éramos la caja chica del gobierno”, asevera.
“La situación de los números rojos era que nosotros teníamos que comprarle la energía en bloque a CFE a un precio muy caro y luego nosotros al usuario, venderla a un precio muy barato. Era por lógica que íbamos a quedar en números rojos siempre”.
Año con año reducían el presupuesto
El exsubsecretario General del SME División Necaxa, Marco Antonio Aguilar, coincide que el cierre de la empresa fue por una cuestión política que ya tenían planeado desde hace años, pues poco a poco los gobiernos federales fueron reduciendo el presupuesto anual.
No la comparto, porque esta fue una cuestión política, desde hace mucho tiempo saquearon a Luz y Fuerza (…) nosotros como ex líderes sindicales casi lo veíamos venir porque en el presupuesto anual ya no le quería invertir el gobierno a Luz y Fuerza, lo vimos en los propios generadores en Necaxa”.