A casi seis meses de haber sido inaugurado el Parque de Amalucan, el proyecto enfrenta un nuevo problema pues ahora han sido robadas las baterías de las luminarias del cerro.
CENTRAL hizo un recorrido en las 74 hectáreas del parque y pudo corroborar que a unas 50 lámparas les fue arrancada la batería que les permite encender por las noches.
Además, aproximadamente 30 postes y paneles solares fueron removidos de donde se encontraban y los trasladaron a la entrada principal del parque. En las imágenes obtenidas por este medio de comunicación se ven como si fueran chatarra.
La parte donde más robos se han dado es por un sendero que se encuentra con dirección a la carretera federal a Tehuacán hacia Amalucan. De hecho, esa zona se encuentra completamente vacía.
Fue el 19 de julio de 2018 cuando el exgobernador de Puebla, Antonio Gali Fayad inauguró el parque con una inversión de 324 millones de pesos.
Cuatro meses después del acto inaugural, el parque se encontraba en condiciones deplorables: los baños llenos de heces fecales, atiborrado de basura y la playa inservible. El mantenimiento está a cargo del Ayuntamiento de Puebla, encabezado por Claudia Rivera Vivanco.
Playa cerrada “hasta nuevo aviso”
En el recorrido también se pudo percatar que la atracción principal, la playa del parque se encuentra cerrada, pues se ve que lleva meses sin que le den mantenimiento.
El agua se encuentra estancada, con un tono verdusco y algunas bolsas de plástico flotando.
Además se encuentra cercado con cintas de “precaución” y hay un letrero que fue colocado por la Secretaría de Desarrollo Urbano y Sustentabilidad del municipio de Puebla, que anuncia a los visitantes que el espejo de agua se encuentra cerrado desde el pasado 27 de diciembre “hasta nuevo aviso”.
Parque carece de vigilancia
El parque cuenta con casetas de acceso, al menos cuatro, sin embargo en una de ellas que se ubica en la entrada de Bosques de San Sebastián no hay vigilante.
Son pocos los elementos de seguridad que se encuentran al resguardo del parque.
Usuarios refirieron a este portal de noticias que la falta de vigilantes ha provocado el robo de las luminarias.
Parque fantasma
A pesar de que en sus primeros días, el parque generó que miles de poblanos abarrotaran el lugar especialmente por niños, la realidad es que ahora luce como un espacio fantasma.
Apenas deambulan algunos vecinos acompañados por sus perros, una decena de trabajadores dando manteniendo a las 74 hectáreas del parque y unos cuantos vigilantes.
Ya no hay gente en los asadores ni en los espacios de lectura, tampoco niños en los areneros y juegos infantiles, mucho menos menos curiosos merodeando en La Victoria, estaría gigante colocada a principios de diciembre de 2018.
Hasta el momento no hay postura del gobierno municipal sobre la situación del parque y qué acciones tomará para evitar que continúe el robo de luminarias y el espejo de agua funcione.
