24 de Abril del 2024

Cosas que toda mamá debería decirle a sus hijos/as

Por Betzabé Vancini / /

Tú, yo y el Ello...

Aprovechando que en estos días celebramos el día de la madre pensé en hacer una columna con buenas prácticas maternales para criar hijos independientes, con una autoestima saludable y con buenas herramientas para hacer relaciones interpersonales. El año pasado me enfoqué en el lado oscuro de la maternidad, sin embargo, siempre es buen momento de apuntar también hacia las buenas prácticas que hacen seres humanos más felices ahora que tanto lo necesita el mundo.

Entonces, sin más preámbulo, te presento una lista de cosas que sí deberías decirle a tus hijos o hijas en cada etapa de sus vidas:

DURANTE SUS PRIMEROS AÑOS DE INFANCIA

  • Te amo incondicionalmente y aunque a veces me enfade, mi amor por ti no deja de existir.
  • Eres muy inteligente y confío en que sabrás encontrar la forma, pero si no puedes, aquí estoy para ayudarte.
  • Me siento orgullosa de tus logros.
  • Me gusta verte hacer amigos y verte sonreír.
  • Siempre que necesites un abrazo o un apapacho, sólo tienes que pedírmelo.
  • Te pido que me obedezcas porque quiero cuidarte y no quiero que te pase nada.
  • No tengo un/a hijo/a favorito/a, cada uno tiene cosas que me hacen sentir un cariño especial. A nadie quiero más o menos.
  • Me gusta verte crecer.
  • No me cuesta cuidarte, no eres una carga, eres una tarea de amor.
  • El hecho de que a veces necesite tiempo sola no quiere decir que no te quiera o que no quiera ayudarte en tus tareas. Dame unos minutos y volveré de mejor humor.

DURANTE LA ADOLESCENCIA

  • Está bien ser quien eres, no tienes que parecerte a nadie más para encajar. Ni siquiera a mí.
  • Eres una persona hermosa y tu apariencia no te define. No dejes que otros te hagan dudar de tu valor.
  • Mi amor es incondicional, incluso esas veces que me desespero o discutimos.
  • Sé que ahora es difícil de entender por qué te pido las cosas, pero más grande lo comprenderás.
  • Sé que hay cosas que no quieres compartir conmigo o contarme, pero por favor, busca a alguien de confianza con quien platicar -maestros, tíos, abuelos-.
  • Si te equivocas al tomar una decisión no voy a juzgarte sino a tratar de ayudarte a enmendar el error.
  • No comparto tus gustos pero no los juzgo. Disfruta de eso que te gusta tanto pero hazlo con moderación.
  • Todos en casa merecemos respeto. Sin importar la frustración que sientas, no nos insultes o maltrates.
  • Ten un poco de paciencia, no todo sale a la primera.
  • Si te rompen el corazón pensarás que no vas a volver a amar, pero sí lo vas a hacer y volverás a sentirte feliz también.
  • Nadie es dueño de tu cuerpo, nadie puede obligarte a hacer algo que no quieras, a exhibirte o chantajearte para que hagas o no hagas algo.
  • Todos tenemos derecho a ejercer nuestra sexualidad siempre y cuando lo hagamos de manera libre y responsable.
  • Tu apariencia está bien, no te compares con otras personas.
  • Afuera hay gente muy cruel de la que hay que cuidarse, pero también hay muchas personas que vale la pena conocer.
  • Confía en tu instinto, si algo te dice que está mal probablemente lo esté.
  • No me mientas, mejor explícame y ayúdame a comprenderte.
  • Siempre voy a desear que estés bien y me preocuparé si algo te sucede.

EN LA EDAD ADULTA

  • Estoy orgullosa del ser humano en el que te has convertido.
  • Eres un buen hijo / una buena hija.
  • Puedo no coincidir con tus opiniones o tus acciones pero voy a respetar lo que decidas.
  • Confío en tu criterio  para resolver problemas, pero si necesitas ayuda, aquí estoy.
  • Sé que haces lo mejor que puedes.
  • Siempre estaré para cuando necesites un apapacho, hablar con alguien o recibir un abrazo.
  • Sé que puedo apoyarme en ti si lo necesito.
  • No estás en una eterna deuda conmigo, lo que se hace con amor no se cobra.
  • No viniste a este mundo a hacerme feliz a mí, si no a ser feliz tú.
  • Eres libre de escoger tu camino en la vida. Me encantará tenerte cerca pero también comprenderé si tu lugar está en otro lado que no sea aquí.
  • Confío en todo lo que te enseñé y confío en todo lo que has aprendido de la vida.

Estas frases aparentemente sencillas pueden llegar a ser muy significativas en el momento preciso en el que como niños, adolescentes o adultos, podemos necesitarlas. La labor de una madre es formativa: nos ayuda a ser mejores seres humanos y a adaptarnos a la sociedad pero también es una labor que nos enseña a amar. Cuando una madre reprueba, devalúa, humilla o condiciona, está aventando al mundo a un ser humano resentido, roto o frágil. Una madre que enseña a tener confianza en uno mismo y a amar incondicionalmente, le entrega al mundo seres humanos íntegros, seguros, dispuestos a dar su talento en beneficio de la sociedad. Que este 10 de mayo sea un buen momento para agradecer a todas esas madres que forman seres humanos íntegros y a hacernos conscientes, como hijos/as que la mejor manera de agradecerle a la persona que nos dio la vida es que nos vea viviéndola felices.

Como siempre, estaré atenta a todas tus opiniones y preguntas vía Twitter, me encuentras como @betzalcoatl.