La renovación del Consejo Estatal será la primera batalla interna del Partido Acción Nacional (PAN) sin la operación directa de Rafael Moreno Valle, por lo que sus huérfanos tendrán que demostrar que pueden mantener el único bastión que les queda.
Las circunstancias políticas cambiaron en el albiazul tras la muerte del ex gobernador y su esposa, Martha Erika Alonso. El grupo conservador mejor conocido como El Yunque ve este proceso interno como la oportunidad de regresar a tomar las decisiones del partido, luego de casi 9 años de ausencia.
Aunado a ello, los yunquistas se asumen como los grandes ganadores del PAN en el proceso extraordinario a gobernador.
Los morenovallistas no hicieron campaña con Enrique Cárdenas, por lo que ellos presumen que su operación ayudó a que el partido ganara la zona metropolitana y la capital a Morena, y que sean el partido más votado en Puebla.
El morenovallismo está fracturado y mermado. No solo enfrentarán la elección del Consejo Estatal sin Moreno Valle, tampoco estará Eukid Castañón, quien orquestaba la operación electoral al interior del partido para que el morenovallismo mantuviera el control.
Los 90 lugares del Consejo Estatal a elegir son determinantes para el futuro del PAN en Puebla. El grupo que obtenga la mayoría podrá definir las candidaturas a alcaldes y diputados locales del 2021.
En el Yunque tienen previsto que será una elección cerrada, pues esta vez no habrá carretadas de dinero para comprar votos, ni presionarán con el aparato de gobierno a los opositores para que no participen.
El próximo 8 de septiembre se realizará la Asamblea Estatal para elegir a los nuevos consejeros estatales panistas. Si los morenovallistas pierden la mayoría que actualmente tienen, oficialmente estará extinto este grupo.