Las bandas de “Los Nenes” y “Los Calabazos” operaban a favor del acalde de Palmar de Bravo, Pablo Morales Ugalde —detenido por lavado de dinero y robo de hidrocarburo— , se dedicaban al robo de transporte de carga y se encargaban de comercializar el hidrocarburo robado a Pemex que ya no entraba en las gasolineras del alcalde.
Fuentes de investigación informaron a PÁGINA NEGRA que ambas bandas son ramificaciones de la familia “Los García”, un conocido grupo de delincuentes que mantiene el control de los límites entre Puebla y Veracruz, y que desde hace décadas sirve a Morales Ugalde y sus hermanos como pistoleros a sueldo y ahora como parte de sus negocios ilícitos.
Tras la detención del edil, los miembros de ambas bandas ahora están peleando quién se va a quedar al frente de todos los negocios ilícitos en los que recibían las órdenes de Pablo Morales Ugalde.
El 1 de septiembre de 2013, César Morales, el sobrino de Pablo Morales Ugalde e hijo de Eduardo Morales Genes estuvo involucrado en el homicidio de Manuel Noria Salas uno de sus trabajadores.
Tras el homicidio, miembros de la familia “Los García” colaboraron para encubrir a Manuel Noria y amenazaron a la familia del trabajador asesinado según señalaron las fuentes de PÁGINA NEGRA en Palmar de Bravo.
De acuerdo a testigos, Pablo Morales Ugalde fue detenido en la presidencia Palmar de Bravo el pasado 5 de julio por elementos encapuchados que llegaron en siete patrullas de la Marina Armada de México por cargos que implican la compra y venta de combustible robado.
El huachicol sobrante
Fuentes de Inteligencia federal revelaron a PÁGINA NEGRA que las dos bandas, “Los Nenes” y “Los Calabazos” manejaban el hidrocarburo robado que no entraba a las gasolineras del edil.
La tarea de “Los Nenes” y “Los Calabazos” se concentraba en mover el huachicol y colocarlo para su venta en distintos puntos del Triángulo Rojo así como en Veracruz.
La ganancia de ambas bandas la obtenían revendiéndolo una vez transportado a las diferentes poblaciones de Puebla y Veracruz ya que cuentan con camiones de carga que han sido obtenidos producto del robo en carreteras.
Ver: PGR y Marina detienen al alcalde de Palmar de Bravo por huachicolero; ya está en SEIDO
El robo de camiones de carga
Las dos bandas también roban camiones de carga en toda la zona de Esperanza, Ciudad Serdán, Palmar de Bravo, Quecholac, Tecamachalco y Amozoc. También llegaron a dar golpes a empresas transportistas en Veracruz.
Incluso tienen maquinaria pesada producto de todos los robos. Las asociaciones de transportistas se quejaron por estas bandas, pero quien está detrás es Pablo Morales Ugalde, relató un poblador de Palmar de Bravo que laboró con los Morales Ugalde.
Las ganancias de Morales se incrementaron debido a que también se comercializaba con los productos robados que revendían en otras tiendas al menudeo. Muchos de estos robos se trataban de electrodomésticos, productos enlatados, alimentos, granos, muebles.
Tú podías ver a la familia García, a Los Calabazos o a Los Nenes vendiendo salas y refris. O pantallas. Incluso a los propios familiares de los Morales Ugalde les caían muchos productos robados, dijo en entrevista el ex empleado del edil detenido.
La información a la que tuvo acceso PÁGINA NEGRA implica además que los productos robados en los caminos del Triángulo Rojo por parte de ambas bandas usualmente eran comercializados en el Mercado Hidalgo.
El 18 de abril, el Ejército Mexicano, la Procuraduría General de la República (PGR), el Servicio de Administración Tributaria (SAT), Petróleos Mexicanos (Pemex), la Secretaría General de Gobierno y la Secretaría de Seguridad Pública, realizaron operativos de revisión en gasolineras propiedad del edil ubicadas en Palmar de Bravo, Tecamachalco y Madero.
El 31 de mayo, Morales Ugalde reconoció que Pemex le quitó el contrato de tres de sus siete gasolineras, pero negó estar coludido con las bandas delictivas que se dedican al robo de combustible en los municipios que conforman el Triángulo Rojo.
El alcalde consideró como una “difamación” las versiones que lo involucran con los huachicoleros y aseguró que sus estaciones de servicio únicamente estaban siendo auditadas por el SAT.
Sin embargo, al siguiente día Pemex confirmó el cierre de gasolineras en Puebla por irregularidades y contradijo al presidente municipal de Palmar de Bravo al señalar que el cierre de siete gasolineras en Puebla —incluyendo las del edil— fue porque la gasolina que despachan la están comprando de manera ilegal.